PROTECCIÓN CONTRA EL SOL
Pretender conseguir un tono moreno subido no es nada recomendable para nuestra piel. El sol es beneficioso en pequeñas dosis y siempre con la protección adecuada; más en la fina piel de los senos, mucho más vulnerable a las quemaduras y al envejecimiento. Un dato: si tomas el sol sin la protección adecuada, estás provocando casi el 75% del envejecimiento prematuro de la piel.
Usa una crema solar con factor de protección alto. No creas que tardarás más en broncearte por usarla o que no lograrás ponerte morena: al contrario, conseguirás un magnífico tono dorado sin castigar tu piel. No expongas tu piel al sol al mediodía, entre las 11.00 h y las 16.00 h.
Puedes preparar el cuerpo para el sol con antelación siguiendo una dieta rica en betacarotenos (sobre todo zanahorias) y tomando complementos alimenticios naturales a base de verduras como zanahorias y judías verdes. La fina piel del pecho y el escote es muy sensible y delicada, por eso utilizar protección solar se hace imprescindible para prevenir la aparición de manchas y protegerla del sol. Recomendamos la crema protección extrema de Avene 60 UVB UVA que puedes encontrar con tres texturas distintas (libre de grasa, normal y coloreada) con la máxima protección.