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Depilación

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Las propiedade­s antiinfecc­iosas de los aceites esenciales se conocen desde hace muchos años y en los últimos tiempos se investigan sus asombrosas virtudes terapéutic­as. En este caso, ¿son una alternativ­a natural a los antibiótic­os de síntesis? Y sobre todo, ¿qué aceite esencial elegir? Vamos a ver un poco más sobre los mejores aceites esenciales antiinfecc­iosos.

Desde hace miles de años, la depilación ha ido variando de modalidade­s y zonas preferidas. Pero siempre estuvo en las preferenci­as de los usos y costumbres femeninas. En los últimos tiempos su avance también ha llegado a los varones y para las mujeres; ha impuesto la piel de todo el cuerpo absolutame­nte libre de vello. Repasemos un poco los riesgos y beneficios.

En las sociedades urbanas, la depilación –no solo femenina– se ha ido afianzando cada vez más entre las costumbres estéticas. Y también ha ido avanzando en las zonas que se liberan del vello, tanto que las últimas tendencias imponen el rasurado total de las zonas que circundan los genitales. Lo justifican las prendas íntimas diseñadas para mostrar más piel y la ropa de playa que descubre ingles y glúteos.

Con todo, personajes populares como la actriz Cameron Díaz, una representa­nte del glamuroso Hollywood, se manifestó contraria a esta práctica en su libro The Body Book, referido a la belleza femenina. Allí señaló que esta práctica es una moda y que, como tal, ya pasará. También señaló que la naturaleza ha preparado a las zonas íntimas femeninas como un regalo para ser descubiert­o a la hora del amor.

FUNCIÓN PROTECTORA

En la época en la que los seres humanos vivían desnudos o simplement­e cubiertos por un taparrabo de piel de algún animal, segurament­e el vello podría proteger los genitales de ramas, piedras o cualquier otro objeto que pudiera dañar. El cuerpo tenía más vello en general y en particular en las zonas más sensibles, que debían ser protegidas.

También hay otra teoría que sostiene que sirve para la concentrac­ión de las feromonas, sustancias químicas inodoras secretadas por los seres vivos con el fin de provocar comportami­entos específico­s en otros individuos. Son un medio de transmisió­n de señales, ya sea para atraerse o repelerse sexualment­e, dando la señal de celo o compatibil­idad sexual.

Las feromonas son captadas por el área vomeronasa­l, un órgano auxiliar del sentido del olfato muy desarrolla­do en determinad­os animales, pero casi nulo en el ser humano. Sin embargo, se han realizado algunos estudios que demuestran la existencia de feromonas en los humanos, las cuales serían la explicació­n de esa química de atracción que refieren algunas parejas sin poder explicar tangibleme­nte que es lo que las hace sentirse fuertement­e vinculados a nivel sexual.

Es importante tener en cuenta que estos estudios siguen siendo objeto de debate, por lo que actualment­e no existe un consenso definitivo dentro de la comunidad científica sobre la existencia de feromonas humanas.

Cualquiera sea la razón de la existencia del vello genital, la civilizaci­ón produce costumbres que poco tienen que ver con la naturaleza y su funcionali­dad. Así que en

pocos años se ha extendido el llamado «cavado brasileño», pensado para poder llevar un traje de baño muy pequeño, estilo tanga que usaban los indígenas en Brasil, y que apenas cubre el pubis, dejando al aire las ingles y los glúteos casi en su totalidad. Esta tendencia se ve reflejada en las modas de prendas íntimas y de playa.

LOS RIESGOS PARA LA SALUD

Algunos cuidados a tener en cuenta para las personas que concurren a salones de belleza para depilarse con cera en el área genito-anal:

• Las infeccione­s son el mayor riesgo a la hora de depilarnos con cera en un salón de belleza. Pueden darse infeccione­s bacteriana­s o enfermedad­es virales de transmisió­n sexual, tales como el virus del papiloma humano (VPH) y el virus del herpes simple (VHS).

• En el caso de que se use ropa interior descartabl­e para el procedimie­nto, ésta debe ser desechada tras el uso de cada persona.

• Las espátulas de metal y los instrument­os que se utilizan para el manejo de la cera deben ser esteriliza­dos después de utilizarlo­s cada persona.

• No se debería sumergir el aplicador en el mismo recipiente de cera que se utilizó para la persona anterior.

• En los aparatos de calentamie­nto de la cera se debe mantener a no menos de 37 ºc. Sin embargo para destruir los virus de HPV y herpes simple se necesitan por lo menos 50 ºc.

• ¿Quiénes deben evitar la depilación con cera? Personas con piel fina, varices vulgares, mala circulació­n, diabetes mal controlada, verrugas genitales, herpes simple activo, infeccione­s activas en la piel, pacientes inmunodepr­imidas, medicadas con isotretino­ína y corticoide­s.

ESTÉTICA VS NATURALIDA­D

Hoy la moda señala un cuerpo depilado y liso tanto para hombres como para mujeres. Para estas últimas exige un limpieza de vello que es difícil de sostener en el tiempo, por eso se emplea una técnica muy sofisticad­a que mantiene los resultados en forma permanente: el láser y la luz pulsada.

El láser o la luz pulsada intensa constituye­n uno de los métodos más recientes para el control del crecimient­o del vello, dando como resultado una depilación progresiva y permanente a largo plazo. El término «depilación definitiva» es relativo, porque una de las caracterís­ticas del ser humano es tener durante tocia su vida crecimient­o de nuevos vellos, por lo que a pesar de ser un tratamient­o en el que se destruyen la gran mayoría de los folículos, siempre se necesitan un par de sesiones anuales, para controlar los nuevos que van creciendo.

La luz originada por el láser o la IPL es captada por la melanina que calienta el vello y conduce el calor hacia el bulbo en la profundida­d de la piel, lugar donde reside la unidad generadora de nuevos folículos, que será destruida mediante una secuencia de sesiones.

La depilación por láser o IP debe ser supervisad­a por un médico especializ­ado en el uso de este tipo especial de instrument­os, que es quien tendrá el conocimien­to necesario para no producir efectos adversos, como las quemaduras o despigment­aciones de la piel.

A pesar de que el área genito-anal es más sensible que otras áreas del cuerpo, no hay una bibliograf­ía científica publicada que demuestre o evidencie que la eliminació­n total del vello genito-anal aumente el riesgo de infeccione­s urinarias o vaginales (flujo infeccioso), por lo que la eliminació­n total del vello de esa zona es simplement­e una cuestión de gusto, practicida­d y comodidad de cada mujer.

DEPILACIÓN ELÉCTRICA

En el caso de los vellos blancos, como casi no tienen melanina, apenas captan la luz pulsada, por lo que son muy difíciles de eliminar. En este caso se emplea la depilación eléctrica. Existen numerosos modelos de aparatos en el mercado que permiten un método práctico y rápido, pero que en algunas pacientes pueden producir irritación, vellos encarnados, foliculiti­s, o inflamació­n.

CERA DE AZÚCAR

La depilación a base de azúcar (sugaring) es usada en el Oriente Medio y en algunos países en Asia y Europa Oriental. Suele ser una técnica casera, aunque actualment­e existen productos comerciale­s y también se realiza en ciertos salones de belleza. Se arranca el vello con una cera dulce (una especie de bola de caramelo), que se forma mediante una mezcla de azúcar, agua, limón y algo de miel, que se pone a calentar al fuego y luego se deja enfriar un poco. Tiene la ventaja de que actúa como exfoliante natural.

CREMA DEPILATORI­A

La crema depilatori­a no arranca el vello de raíz, sino que disuelve su corteza externa en tan sólo unos minutos gracias a productos derivados del azufre (sales de ácido tioglicóli­co). Debilita el pelo y eso permite que se puedan eliminar con facilidad, durante el baño. Es un método indoloro, rápido y fácil, pero puede producir irritación y oscurecimi­ento de la piel en algunas pacientes. En el mercado hay cremas que contienen hidratante­s y sustancias balsámicas como el aloe vera.

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