PERFIL
Cuando era pequeña, Raquel Marín, quería ser detective. Y muchos años más tarde convirtió ese afán por descubrir en una brillante carrera como investigadora. Ahora esta neurocientífica madrileña tiene toda su atención puesta en el mundo que se esconde dentro de nuestra cabeza y cómo nutrirlo mejor. Después de doctorarse en Biomedicina en Canadá, Marín volvió a España como catedrática de Fisiología para la Universidad de La Laguna, en Tenerife. Por su trayectoria ha recibido varios galardones, como el Premio a la Mujer Investigadora de Biomedicina en la Universidad de Laval, en Quebec; la Medalla Europea al Trabajo de Economía y Competitividad; o la Medalla de Honor del Instituto de Ciencias Forenses de Barcelona, entre otros.