Astrágalo, una planta adaptógena
El astrágalo (Astragalus membranaceus) es una leguminosa muy popular en Medicina Tradicional China (MTCh), en donde se conoce como «Huang qi». Los investigadores chinos saben que la raíz de esta planta estimula el número de macrófagos en la sangre, que su capacidad de fagocitosis (ataque a gérmenes extraños) aumenta y que favorece una mayor producción de interferón, una proteína que produce el sistema inmunitario de forma natural en respuesta a los virus u otros agentes externos, o en caso de que aparezcan células cancerígenas. La planta tiene su origen más remoto en Mongolia y el Norte de China y hoy en día se cultiva allí principalmente. En primavera se recolectan y usan las raíces y su uso como vigorizante y tónico energetizante forma parte de una larga tradición, ampliamente comprobada a lo largo de los siglos.
Propiedades y usos medicinales
En la MTCh suele usarse muy a menudo combinada con otras plantas medicinales en preparados para el tratamiento de todo tipo de trastornos: cardiopatías, enfermedades hepáticas, enfermedades renales, algunos tipos de cáncer, infecciones de tipo viral y trastornos del sistema inmunitario. En Occidente se comenzó a utilizar el astrágalo a principios del siglo XIX, como un ingrediente más en algunos tónicos, pero el interés por la planta y su creciente popularidad se deben al descubrimiento de la riqueza de la raíz en polisacáridos estimuladores del sistema inmunitario, así como en otros interesantes principios activos (saponinas, flavonoides) capaces de incidir sobre muchas enfermedades.
Como planta adaptógena es capaz de regularizar el sistema nervioso y el sistema inmunitario. Se puede obtener en forma de raíz seca, cápsulas o extracto líquido.
Un antivirus natural
Entre las principales funciones del Huang qi o astrágalo destaca su potente actividad antiviral. Aunque también se emplea para el tratamiento de hipertensión, al igual que la mayoría de plantas y sustancias adaptógenas, su papel benefactor sobre el sistema inmunitario es muy importante. Mejora las defensas, por ejemplo, en pacientes con diálisis por insuficiencia renal, lupus eritematoso sistémico y miastenia. Asimismo incide en la actividad antitumoral y aumenta la producción de glóbulos blancos y rojos.
En Norteamérica se está aplicando a enfermos con hepatitis B y C, en enfermedad vascular periférica, hipertensión arterial y trastornos del sistema inmunitario. También es muy útil en caso de asma, úlcera péptica, trastornos respiratorios, diarrea e infecciones. Además, en MTCh también se utiliza en diabetes, cardiopatías y en lo que hoy conocemos como enfermedad de Alzheimer.
Vigor y refuerzo
La raíz del astrágalo incrementa la resistencia y el vigor, especialmente en caso de estrés o al hacer ejercicio. En la MTCh se recomienda como tónico sustitutorio del ginseng en personas menores de 40 años.
Las propiedades del astrágalo se elevan ostensiblemente si se administra como refuerzo dentro de un buen tratamiento general adecuado para la enfermedad que se esté tratando. Entre los estudios llevados a cabo sobre las propiedades, efectos y utilización del astrágalo con resultado positivo tenemos una poderosa actividad antiviral (infecciones pulmonares, pericarditis, hepatitits B y C, virus del papiloma humano); tonificante para deportistas; reducción de efectos secundarios nocivos de la quimioterapia del cáncer; hipoglucemiantes (ideal en caso de diabetes); en caso de cardiopatías e insuficiencia cardíaca; como protector hepático y como estimulante del sistema inmunitario.
Decocción de astrágalo
El astrágalo se puede tomar en forma de tisana. Para preparar la tisana se pueden hervir
30 g de raíz de astrágalo en una taza de agua durante
15 o 20 minutos.