Coquitos, las nueces deBrasil
son un alimento ideal para deportistas, estudiantes y personas que necesitan un aporte importante de nutrientes
Las nueces del Brasil, también llamadas coquitos brasileños o nueces amazónicas, son las semillas de un gigantesco y longevo árbol, cuyo nombre botánico es Bertholletia excelsa que puede llegar a medir hasta 50 m y vivir más de 1.000 años. Produce unos frutos grandes y redondos parecidos a los cocos que en su interior albergan unas 20 nueces. Crece en la región de la Amazonia, en los bosques de Colombia, Brasil, Venezuela, Perú y Bolivia.
Las tribus de estas tierras las han consumido desde hace siglos y la consideraban un alimento-panacea. Hoy disponemos de base científica para saber el porqué de tal afirmación. En la actualidad es un fruto seco de consumo muy extendido por todo el mundo debido a sus propiedades medicinales, nutricionales y a su agradable sabor. El principal exportador de este fruto, curiosamente no es Brasil sino Bolivia.
Alto contenido en selenio y vitamina E
Las nueces de Brasil son el alimento de mayor contenido en selenio, solo una nuez aporta de 70 a 90 microgramos, equivalente a la cantidad diaria recomendada. El selenio es un micronutriente esencial, cuyo aporte solo se produce a través de la alimentación.
Este valioso mineral desempeña un importante papel en el organismo para que se desarrollen determinadas funciones con normalidad:
Forma parte de la enzima glutatión peroxidasa, antioxidante que impide la formación de radicales libres, mejora la función inmunitaria y previene el envejecimiento prematuro;
Contribuye a la producción adecuada de esperma, algo a tener en cuenta en el tratamiento de la esterilidad masculina.
Mejora la función tiroidea, por lo que se recomienda en el hipotiroidismo.
Actúa como antiinflamatorio y anticancerígeno, por tanto está indicado en el tratamiento de la artritis y en la prevención del cáncer.
A las citadas propiedades antioxidantes del selenio, se suman las de la vitamina E, de la cual encontramos un alto contenido en este fruto seco. Dicha vitamina es muy importante para el funcionamiento del sistema reproductor, además de ayudar a mantener en buen estado la piel y el sistema cardiovascular, evitando la oxidación de las grasas y la formación de trombos.
Un bajo nivel de selenio y vitamina E ha sido asociado a una mayor probabilidad de desarrollar enfermedades como el lupus y la artritis reumatoide. Como dato significativo cabe destacar que, según los estudios realizados, en España más del 50% de la población presenta niveles bajos de selenio.
Algo importante a tener en cuenta es saber mantenernos dentro de los márgenes de selenio que el organismo necesita, pues tan perjudicial es que estén bajos, como demasiado altos, lo cual se podría producir por un consumo importante de estas semillas. Son tan ricas en selenio que 100 gramos de estas, superan 30 veces la cantidad máxima recomendada al día, de hecho tan solo con 6 nueces ya se sobrepasa mucho la dosis máxima diaria recomendada. El consumo excesivo y mantenido durante tiempo de este alimento, podría generar “seleniosis” o “toxicidad por selenio”, algo que puede manifestarse por trastornos digestivos, mareos, o incluso alteraciones neurológicas respiratorias o renales. Por dichas razones el consumo de este alimento se debe realizar con moderación.
Fuente de proteínas vegetales, omega 6 y minerales
Las nueces del Brasil constituyen un buen aporte de proteínas vegetales y ácidos grasos esenciales monoinsaturados y poliinsaturados, pues son uno de los alimentos más ricos en ácido linoleico omega 6, además de contener ácido oleico. El ácido linoleico tiene propiedades antiinflamatorias y cardiosaludables, algo que incrementa su valor dietético. También son una buena fuente de lecitina, fosfolípido importante para el buen funcionamiento del sistema nervioso que se recomienda para favorecer la memoria, disminuir la ansiedad y el estrés, además de reducir los niveles de colesterol.
Otros nutrientes destacables son el calcio y el magnesio. Todo ello hace que las nueces del Brasil sean un alimento ideal para deportistas, estudiantes y personas que necesitan un aporte importante de nutrientes, o presentan alteraciones tendino-musculares y óseas, como en casos de fibromialgia, fatiga crónica y osteoporosis.
En la cocina
Las nueces de Brasil pueden consumirse de diversas formas, la más frecuente es comerlas solas y crudas como aperitivo o merienda.
Gracias a su agradable sabor, que recuerda un poco al de coco, es un alimento que a menudo se emplea en repostería para elaborar helados, dulces, postres y bebidas vegetales.