Huperzina ylamemoria
¿Podemos hacer algo, ahora para mismo, para aplicar un tratamiento eficaz en caso del mal de Alzhéimer? Se dice que este grave trastorno oscurece nuestra memoria, aunque hoy se conoce una sustancia que puede ayudar a revertir los síntomas del deterioro co
LA COMUNICACIÓN DE LAS NEURONAS
Seguro que habréis entendido al cantautor y gozáis del momento presente, porque vivir sin memoria es muy incómodo; entre los mecanismos más importantes a través de los cuales las personas retenemos información, albergamos recuerdos y desarrollamos habilidades intelectuales tenemos el aprendizaje y la memoria.
Ambos resultan de la actividad fisiológica de millones de neuronas que interactúan y se comunican entre sí a través de los neurotransmisores.
Un premio Nobel, el biólogo y médico alemán Otto Loewi descubrió en 1921 los neurotransmisores. Hasta entonces se creía que las neuronas se comunicaban entre sí de forma eléctrica, pero en realidad lo hacen liberando sustancias químicas que actúan como mensajeros a través del cerebro, transportando información de una neurona a otra.
QUÍMICA PARA CONSERVAR LOS RECUERDOS
Gracias a la memoria guardamos la información adquirida para utilizarla cuando sea necesario. En los “archivos” de nuestra memoria caben conocimientos y recuerdos incluso de mucho tiempo atrás. Aunque pasen años y años podemos recordar vívidamente las manos de nuestro abuelo, el color del cielo de nuestra infancia, el olor de los prados o los sabores de las comidas en familia. Aunque son varias las estructuras y procesos biológicos que intervienen en la memoria, en ella participan diversos neurotransmisores, entre los que destaca principalmente la acetilcolina.
Para conservar a buen recaudo ya no sólo los recuerdos, sino también la agudeza y rapidez mental y la capacidad de aprendizaje, resulta esencial mantener unos buenos niveles de acetilcolina. Las variaciones en su nivel conllevan alteraciones en la conducta,
“Hoy soy rico; no tengo memoria” (SISA)
y se asocian a su vez con síntomas neurológicos, como la pérdida de memoria y de atención, habla confusa, falta de coordinación (ataxia), confusión y desorientación.
Tan pronto aparezcan los primeros síntomas de pérdida de memoria (como los típicos “despistes”), o incluso antes, es el momento de actuar directamente sobre la acetilcolina.
HUPERZINA, UNA PLANTA POCO CONOCIDA (Y NO HABLAN DE ELLA LOS NEURÓLOGOS)
La industria farmacéutica no se muestra demasiado exitosa para ofrecer una verdadera solución ante el Alzhéimer y el deterioro cognitivo, por más que lleve décadas intentándolo.
Sin embargo, buscando una solución natural que actúe directamente sobre los neurotransmisores –y en especial sobre la acetilcolina por su implicación directa en la salud cognitiva– debemos volver nuestra vista a la medicina tradicional china, que lleva utilizando desde hace miles de años una planta denominada Huperzia serrata (o licopodio chino) en forma de infusión.
Su secreto milenario para mejorar las funciones cognitivas y prevenir el deterioro de las neuronas radica en su principio activo fundamental, la huperzina A, una sustancia sorprendente y poco conocida en Occidente que ayuda a mantener los niveles del neurotransmisor acetilcolina, fundamental para la salud cerebral y la memoria.
¿DESACTIVAR UN ENZIMA?
Se ha investigado y descrito a la huperzina A como un inhibidor eficaz de la enzima acetilcolinesterasa. Esta enzima descompone la acetilcolina, lo que llevaría a su disminución en el cerebro. Al inhibir este proceso, los niveles de acetilcolina se mantienen más estables. En otras palabras, la huperzina A disminuye la actividad de la enzima acetilcolinesterasa, culpable de la disminución de la tan necesaria acetilcolina.
Un aporte al cerebro de huperzina A puede detener el deterioro cognitivo, aumentar su memoria y prevenir y tratar la demencia y el Alzhéimer, lo cual podría ser decir mucho. Pero el caso es que en China se han llevado a cabo numerosos estudios cientí-
ficos con huperzina A con resultados esperanzadores: se ha demostrado por activa y por pasiva que mejora significativamente los déficits de memoria en personas mayores con
■ Olvidos benignos (asociados a la edad, pero sin otras patologías cognitivas asociadas).
■ Alzhéimer.
■ Demencia vascular (es decir, con problemas cognitivos asociados a pequeños accidentes cerebrovasculares).
Y lo mejor es que además no presenta toxicidad ni efectos secundarios in- deseables (todo lo contrario que los medicamentos de la industria farmacéutica).
MEMORIA, ALZHÉIMER Y HUPERZINA A
Ha sido ampliamente investigada en China (la planta de donde se extrae es originaria de allí), pero en Europa no se le ha prestado la atención que merece. Sin embargo, algunos terapeutas especializados en salud y medicina na-
tural y el empleo de plantas medicinales sí han traído hasta nuestro país la evidencia científica sobre el extracto estandarizado de Huperzina serrata, en un congreso de Fitoterapia.
Los pacientes de los estudios que se han llevado a cabo en China con extractos estandarizados de Huperzina serrata lograron mejorías en su memoria, en sus habilidades cognitivas y en habilidades de su vida diaria tras solo unas pocas semanas de tratamiento.
Es decir, que mientras los expertos más comprometidos con la salud natural se están preocupando de acercar este conocimiento a sus pacientes, a la gran mayoría de la población en nuestro país todavía hoy es escaso el acceso a esta solución.
Son tantos los beneficios sobre la salud cognitiva de la Huperzia serrata que en China está autorizado también como recurso medicinal en caso de Alzhéimer, ya que cada vez existe más evidencia de esta posible utilidad. Por ejemplo, un estudio que evaluó a 103 personas con enfermedad de Alzhéimer. Cerca del 60% de los pacientes tratados con huperzina A mostraron mejorías en la memoria, el pensa- miento y en las funciones de la conducta al cabo de solo ocho semanas de tratamiento. Se les sometió a todo tipo de pruebas (escala de memoria de Wechsler, escala de demencia de Hasegawa, escala de actividad de la vida diaria, escala de síntomas…) y los resultados fueron rotundos: sin ningún otro tratamiento, y solo tomando Huperzia serrata, más de la mitad de ellos experimentó espectaculares mejorías.
Se trataba de enfermos de Alzhéimer diagnosticados, de personas realmente enfermas que lograron ganar autonomía, habilidades cognitivas, memoria y recuperar sus recuerdos, ¡en solo ocho semanas!
Y sin ningún efecto secundario.