El propóleo
El propóleo o própolis (del griego èВБèЬЍЇКГ) es una resina natural que las abejas obtienen a partir de fuentes vegetales como los brotes y la corteza de los árboles y de las yemas de savia. Esta resina es extraída para dotar a las colmenas de más estabilidad y protección, tapar agujeros y prevenir parásitos y enfermedades (al igual que las abejas hacen con la cera y otros componentes). Se calcula que una colmena puede producir entre 150-300 gramos de propóleo al año.
De consistencia muy viscosa, los ingredientes que la componen varían en función de su localización geográfica, el entorno natural y el método utilizado por cada apicultor (no es lo mismo el própolis del Mediterráneo que el de los alpes suizos o el de Brasil, Chile o China). Por tanto, su color puede variar, yendo del marrón oscuro al rojo, verde, etc. A medida que sube la temperatura, su consistencia se ablanda y, ya a más de 60 u 70º C se vuelve totalmente líquida.
En líneas generales, su composición es aproximadamente la siguiente:
• 50 % de resinas y bálsamos, que contienen flavonoides y ácidos fenólicos o sus ésteres.
• 7,5-35 % de ceras.
• 10 % de aceites esenciales y aromáticos volátiles.
• 5 % de polen.
• 4,4-19,5 % de impurezas.
Es rico en aceites esenciales, minerales, polen y vitaminas del grupo B y provitamina A.
beneficios y contraindicaciones
Desde la Antigüedad, el propóleo ha sido utilizado de diversas maneras: como antiséptico, antiviral, cicatrizante, antimicrobiano, antifúngico, in mu no estimulante, anti inflaman torio, anestésico, he pato protector y cosmético.
Es pues un producto con amplias propiedades biológicas y farmacológicas que se utiliza en numerosas ocasiones:
• Combate los estados gripales.
• Previene las caries.
• Regulariza la tensión arterial.
• Ayuda a prevenir los parásitos.
• Cicatriza quemaduras y heridas en la piel.
• Mejorar el sistema circulatorio.
• Resulta muy útil en casos de anginas, faringitis, laringitis, aftas bucales, muguetes y abcesos dentales.
• Mejora molestias como la úlcera gástrica, la diverticulitis y la enfermedad de Crohn.
• Diluido en agua, se utiliza para cándidas, llagas uterinas, inflamaciones vaginales y picazones.
• Favorece la lucha contra acné, micosis, hongos de la piel, sabañones e irritaciones epidérmicas.
Contraindicaciones
El propóleo es relativamente atóxico, pero no es aconsejable masticarlo grandes cantidades. Puede causar reacciones alérgicas y algunos trastornos digestivos; por otro lado, no es aconsejable en casos de asma bronquial alérgica
Cómo consumirlo
En el mercado podemos encontrar distintas marcas en forma de ampollas, pastillas, sprays o al natural.
El propóleo natural es el más concentrado y el que mejor conserva sus ingredientes, pues no ha pasado por ningún proceso de fabricación, pero su sabor es bastante fuerte. Si se toma en trocitos, puede masticarse como un chicle. Otra opción es tomarlo en forma de pastillas, también de fuerte sabor.
Suele ser muy consumido por quienes utilizan la voz como instrumento de trabajo (locutores, cantantes profesores) debido a su alta concentración de propiedades.
Si optamos por las gotas, sea extracto o tintura, hay que tener muy clara la posología en función de la concentración de productos, de la edad de paciente, de la zona a tratar y del tipo de dolencia.
Se deben tomar unas 10 gotas diluidas en un poco de agua, tres o cuatro veces al día. En caso de infección por bacteria resistente, se pueden tomar directamente en la boca, de 5 a 10 gotas, dos o cuatro veces diarias o también se puede aplicar directamente en las heridas para su curación. Cuando la gripe comienza, es muy eficaz tomar el propóleo cada hora, hasta experimentar mejoría. Está comprobado que el propóleo, acorta la vida del virus de la gripe.
La tintura se prepara con propóleo y alcohol etílico de 70°, con una variación que va del 5% hasta el 30% de alcohol. Después de mezclar ambos ingredientes, guardar durante 15 días, agitándolo diariamente un par de veces. Finalizado este periodo, debe almacenarse almacena en un frasco oscuro con una pipeta de goteo.
Se pueden aplicar unas gotas sobre las heridas o sobre la gargante o bien diluirlas en agua, té, zumo pueden diluir unas gotas en un té, agua o zumo.
Una última opción es mezclada con miel, Es una manera fácil de tomarla y si es una miel de procedencia ecológica, sin aditivos, ni lactosa, ni grasas, nos beneficiaremos de las propiedades de este producto. La desventaja es que la concentración de própolis es menor.
En definitiva, es este un estupendo aliado de nuestra salud, un regalo de la naturaleza y de las inteligentes, laboriosas y perseverantes abejas, del que podemos beneficiarnos de distintas maneras.