Toque rústico
Rojo y lila se combinan con elegancia en esta corona, que tendrás entre tus manos en pocos minutos: separa la cabeza de los tallos y une las dalias con un alambre por el trozo de tallo restante. Ata los extremos y crea un pequeño ojal por si quieres colgarla. Para que aguante más que unas horas, la opción pasa por dejarla flotar en un bol lleno de agua. ¡Así de simple!