EL PODER DE CRECER
Diseñar, y muy especialmente ilustrar, es, para mi, la conjunción de mi pasión por representar la forma, el color y la composición, junto con mis fuentes de inspiración; todo filtrado y enfocado hacia un producto final con el que la gente quiera convivir, y, así, inspirar a otros”. Laura lleva una una década trabajando, tanto en España como fuera de nuestras fronteras, y por eso puede comparar: “me ha resultado difícil muchas veces encontrar los apoyos económicos y culturales necesarios; más en España que en otros países del norte de Europa o la Gran Bretaña pre Brexit, por ejemplo”. Y luego está el espinoso asunto de la desigualdad: “sí la he sentido, sobre todo al tener que conciliar justo cuando empezaba a desarrollar mi carrera”. Hoy se encuentra “en un punto de crecimiento y diversificación de mi trabajo, tanto a nivel de creación de conceptos, como de medios y sectores en los que se aplican mis diseños”, y acaba de firmar una serie de pañuelos de seda colaboración con el Museo Thyssen-Bornemisza, inspirados en su colección permanente.
“ME HA RESULTADO DIFÍCIL MUCHAS VECES ENCONTRAR LOS APOYOS ECONÓMICOS Y CULTURALES NECESARIOS”