CELEBRANDO AL MAESTRO
Nuestro recuerdo a Vico Magistretti tras cien años de legado
SU LEGADO ESTÁ TAN VIVO QUE EL 80% DE LAS 120 PIEZAS QUE DISEÑÓ SIGUE EDITÁNDOSE A DÍA DE HOY
Además de arquitecto y diseñador, e influyentísimo profesor, Vico Magistretti fue uno de los grandes pensadores que le dieron forma a la modernidad contemporánea. Su legado e influencia están tan vivos hoy, en el centenario de su nacimiento, como cuando ganaba Compassos d’Oro e inauguraba pioneros edificios
Asu padre, Pier Giulio Magistretti, arquitecto novecentista autor de, entre otros proyectos en Milán, el Palazzo dell’Arengario en la plaza del Duomo o la fachada a la plaza Beccaria de la Galería del Corso, Vico Magistretti (Milán, 1920-Milán, 2006) no solo le debió encontrar pronto su vocación, también un comienzo profesional. Recién licenciado, Vico empezaría a colaborar en el estudio que Pier Giulio había fundado en via Conservatorio 20 –hoy sede de la Fondazione Studio Magistretti– y que dirigiría hasta su temprana muerte en 1945. El talento, en cambio, no necesitó heredarlo. “Tuve mucha suerte en ese sentido, en parte porque mi padre pertenecía a otra generación con la que yo no compartía nada. Empecé de cero, y creo que eso me ayudó mucho. Recuerdo, por ejemplo, que, cuando hice mi primer boceto ex tempore, una cosa muy formalista con cables sosteniendo un toldo de metal para la entrada de una exposición, mi padre lo vio y
le horrorizó. Con razón”, explicaría en una entrevista.
Su camino iba a abrirlo él mismo. Pero no solo. El encuentro en Suiza con su colega Ernesto Nathan Rogers, por ejemplo, sería fundamental para modelar esa visión humanista de la arquitectura y el diseño que hicieron de él no solo uno de los creadores clave del bel design italiano, sino una figura imprescindible –en sus facetas como investigador y profesor– para comprender la evolución de una disciplina que ha interiorizado su mandato de “mirar los objetos cotidianos con ojos curiosos e insólitos”. Sin olvidar las alianzas con verdaderos motores del sector como Umberto y Cesare Cassina o Maddalena de Padova.
La iniciativa más importante de este centenario, algo deslucido por la crisis del Covid-19, es, quizá, el lanzamiento de la web archivio.vicomagistretti.it –activa desde el mes de enero–, resultado de más de una década de trabajo de la fundación que lleva su nombre: miles de bocetos y dibujos, planos, descripciones de proyectos, patentes, fotografías, artículos de revistas, catálogos de exposiciones e incluso correspondencia profesional, así como más de 400 perfiles histórico-críticos de arquitectura y diseño, realizados o no, que pueden consultarse libremente.
Y, por supuesto, están también sus obras, que podemos –debemos– seguir disfrutando. Tanto de icónicos edificios como la Torre al Parco, el cine Moderna o la Catedral de la Natividad de Santa María –por el momento solo online–, como de los muchos diseños –de las 120 piezas que concibió a lo largo de su carrera, el 80% sigue aún en producción– que Cassina, Oluce, Artemide, De Padova o Flou tienen el orgullo de atesorar en sus catálogos.