ESTÉTICA CON ÉTICA
La interiorista madrileña Lorna de Santos se confiesa, al menos de cabeza, “tan creativa como caótica”, y por ello, dice, “necesito, al llegar a casa, estar en paz y calma”. Una máxima que, profesionalmente, traslada a sus proyectos: “Puede que haya un nuevo minimal en el aire, pero nosotros no hacemos tendencia; queremos proponer un nuevo modelo de vida, sereno y responsable”. El año pasado triunfó en Casa Decor con su aplaudidísimo ‘Topografías del placer’, en el que ética y estética se abrazaban. “Me encanta la filosofía wabi-sabi, un concepto japonés del que se empieza a escuchar mucho últimamente y que reivindica la belleza de lo imperfecto. Queríamos hacer un llamamiento a reflexionar sobre la actividad frenética de nuestra sociedad, y proponíamos crear un nuevo paradigma estético basado en la naturaleza, que devuelve, en cierto modo, la sensatez al arte de vivir”. E igualmente esencial es, para ella, la sostenibilidad: “Mi compromiso con ella consiste en recuperar la arquitectura bien hecha, trabajar con artesanos y pequeños talleres y ejecutar nuestros proyectos con conciencia medioambiental y responsabilidad social”.
“PUEDE QUE HAYA UN NUEVO ‘MINIMAL’, PERO NOSOTROS NO HACEMOS TENDENCIA; PROPONEMOS UN NUEVO MODELO DE VIDA, SERENO Y RESPONSABLE”