Sánchez blinda a las empresas de una opa, pero no de la quiebra

Las medidas económicas aprobadas por el Gobierno son «insuficientes» para los expertos, que no descartan la opción de los rescates

El Covid-19 ha dejado en hibernación al tejido empresarial de España. Los valores de las cotizadas no dejan de caer en bolsa, muy especialmente las de sectores estratégicos como el turismo. Decenas de empresas han anunciado ERTE que afectarán a miles de trabajadores. Los analistas trabajan bajo la tesis de una economía paralizada hasta, como poco, el otoño. Ante esta situación, ¿acabará el Gobierno rescatando a las empresas que se sitúen cerca del abismo?

Diciembre de 2019. La OMS confirmaba el primer caso de coronavirus. Por aquel entonces nadie pensaba que traspasaría las fronteras de Wuhan y mucho menos de China. Marzo de 2020. Solo cuatro meses más tarde, el Covid-19 ha alcanzado a más de 120 países.

«Del shock de oferta inicial provocado por la dependencia mundial de los proveedores chinos en sectores estratégicos como el automóvil o las farmacéuticas, que una crisis en principio local se haya convertido en pandemia ha derivado en un shock de demanda. El consumo queda restringido a los productos de primera necesidad. La suma de estos dos shocks complica sustancialmente la situación en la economía real y podría degenerar una FULVLV HFRQyPLFD \ ÀQDQFLHUD TXH DIHFWDUtD especialmente al eslabón más débil, las pymes, micropymes y autónomos», explica Miguel Ángel Bernal, profesor de la Fundación de Estudios Financieros.

Tejido que, por otra parte, en España ya estaba empezando a sufrir los efectos de la desaceleración si tenemos en cuenta los resultados del último radar empresarial de Axesor, TXH UHÁHMDQ TXH GXUDQWH ORV GRV SULPHURV PH ses del año los concursos de acreedores se incrementaron un 29,40 por ciento y la creación de empresas se desplomó en los dos primeros meses del año un 8,71 por ciento.

Grandes y pequeñas de sectores estratégicos HVWiQ HQ OD FXHUGD ÁRMD /DV FRPSDxtDV GHO sector turístico -que representa el 12 por ciento del PIB en España- se están llevando la peor parte. En el parqué, las cotizaciones de IAG