Su mayor esperanza es desarrollar una única pastilla con la que se pueda controlar este coronavirus y los siguientes
«Estamos descubriendo estudios desconocidos sobre investigaciones con murciélagos», detalla Ho. «Los murciélagos representan una quinta parte de los mamíferos del planeta. Es información que desconocíamos. Los murciélagos son portadores de numerosos virus: el SARS, el ébola y quizá este coronavirus». El Covid-19 no es el primero, y no será el último. Ho quiere prepararse ahora para el próximo.
(VFXFKDU HVWR IXH VXÀFLHQWH SDUD -DFN 0D el hombre más rico de Asia. También le bastó a Zhi Hong, consejero delegado de Brii Biosciences, para aportar 2 millones de dólares. Hong ejerció como especialista en enfermedades infecciosas en GlaxoSmithKline Plc y conoce a Ho desde hace años. «David ha diseñado un programa rápido pero muy razonable», afirma Hong. Si el laboratorio de Ho desarrolla un medicamento, una farmacéutica grande tendría que probarlo y fabricarlo. Todavía no existe un acuerdo formal sobre cómo se procedería en este caso. No había tiempo que perder en abogados. «Ahora misPR VROR HVWDPRV LQYLUWLHQGR HQ IH \ FRQÀDQ]D en la relación, y en la reputación de David», aclara Hong. «Simplemente le dijimos que cogiese el dinero».
El principal objetivo del laboratorio es encontrar un anticuerpo que bloquee el acceso del virus a las células, ya sea para prevenir la infección o para tratarla. El primer paso fue REWHQHU JOyEXORV EODQFRV HVSHFtÀFRV OODPD dos células B de memoria, de pacientes que se han recuperado del Covid-19. Estas células, llamadas así porque pueden recordar un virus durante décadas, contienen marcadores en su VXSHUÀFLH TXH SHUPLWHQ TXH HO FXHUSR JHQHUH rápidamente muchos anticuerpos para ese virus. Estos anticuerpos nos protegen frente D OD LQIHFFLyQ SRU &RYLG $ ÀQDOHV GH HQHUR Ho solicitó a sus contactos en Hong Kong que extrajesen muestras de sangre de dos pacientes convalecientes. Su equipo de Nueva York pasó días tramitando las autorizaciones gubernamentales y gestionando el envío. Las FpOXODV VH SXULÀFDURQ VH LQWURGXMHURQ HQ YLD les pequeños, se congelaron en nitrógeno líquido a -150 °C y se enviaron al laboratorio de Ho a través de un servicio de mensajería especializado. Llegaron intactas a finales de febrero.
Tan pronto como recibieron las células, en el laboratorio de Ho empezaron a trabajar FODVLÀFDQGR ODV FpOXODV % H[WUD\HQGR $51 produciendo ADN para diferentes anticuerpos anticoronavirus y expresando esos anWLFXHUSRV HQ OD VXSHUÀFLH GH FpOXODV GH OH vadura. «Luego empezamos a pescar», explica Ho. «Y obtenemos un cebo». El cebo son las proteínas de las espículas que sobreVDOHQ GH OD VXSHUÀFLH GHO YLUXV R HQ HVWH caso, del pseudovirus creado en el laboratorio. Cuanto más se adhiera un anticuerpo a la proteína, mejor. «Sacamos muchos, comparamos su actividad y seleccionamos los mejores», explica. «También podemos cambiar partes del anticuerpo para que se adhiera aún más».
Las posibilidades de que esta investigación o una investigación similar en cualquier otra parte del mundo derive en un tratamiento son relativamente altas. Fue la estrategia que funcionó con el ébola. Regeneron Pharmaceuticals Inc., compañía que desarrolló un trataPLHQWR GH DQWLFXHUSRV HÀFD] FRQWUD HO pEROD también está trabajando en un «cóctel» de DQWLFXHUSRV SDUD HO FRURQDYLUXV \ DÀUPD TXH las pruebas en humanos podrían iniciarse a principios de verano. Pero este tipo de medicamento tendría que inyectarse, por lo que probablemente debería mantenerse refrigerado y ser administrado por médicos, lo que limitaría su uso. No es la solución ideal, pero no cabe duda de que es un buen principio.
Los graves errores iniciales de Salvador Illa en la gestión del estado de alarma debilitaron la posición del Gobierno que ha debido limitarse a la economía y la propaganda.
El primer impacto sanitario del estado de alarma fue un verdadero despropósito: la Guardia Civil requisó 150.000 mascarillas en una fábrica de Alcalá la Real (Jaén) y las envió al hospital Infanta Sofía de Madrid. El empleo del término «incautación» por parte del director operativo de la
Guardia Civil impuso un estigma delictivo a la empresa Diseños NT. Pero los hechos eran simples. La fábrica recibió una llamada de presidencia del Gobierno en la que se le pedía poner su línea de producción a disposición de Sanidad, cosa que su gerente hizo en el acto. Pero las 150.000 mascarillas que estaban listas formaban parte de un pedido de la Junta de Andalucía. Acabaron en Madrid.
Un incidente similar se produjo en Galicia, donde un empresario proveedor de la Xunta vio cómo una importación de mascarillas quedaba retenida por órdenes de Sanidad. El presidente gallego, Alberto Núñez
Feijóo, procedió unilateralmente y asumió la responsabilidad de «liberar» el embarque.
También hubo casos de no coger el teléfono: fue el de un empresario que, tras intentar ponerse en contacto con Sanidad de manera infructuosa, recolocó varios millones de mascarillas y test en Miami y Australia que sí mostraron interés. Y muchas empresas decidieron que a palos no iban a obedecer y paralizaron las importaciones ante el temor a que sus productos fueran «incautados» como si fueran narcos.
En muy pocas horas, el ministro de Sanidad, Salvador Illa, designado delegado
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, mantiene una videoconferencia con los presidentes autonómicos para abordar la crisis del coronavirus el pasado 23 de marzo. máximo de Pedro Sánchez para la gestión del estado de alarma, organizó un desbarajuste fenomenal con las mascarillas, los equipos de protección individual (EPI) y los test del coronavirus. Al cabo de tres o cuatro días, la situación de desabastecimiento de mascarillas, equipos, respiradores, material para las UCI, tests de coronavirus, geles desinfectantes y otros elementos básicos se había generalizado.
A pecho descubierto
Como resultado, el personal sanitario tuvo que actuar a pecho descubierto, porque desde el mismo ministerio que desorga
En la conferencia de presidentes, Sánchez tuvo que escuchar un amplio repertorio de críticas, no solo de las autonomías del PP
QL]y HO ÁXMR GH UHFXUVRV VH OHV GLHURQ LQV trucciones el martes 17 de marzo para actuar sin mascarillas ni equipos de protección. El documento se titulaba «Medidas excepcionales ante la posible escasez de EPI: estrategias alternativas en situación de crisis» y les liberaba de emplear protecciones siempre que atendieran a los pacientes a dos metros de distancia.
El presidente del Gobierno depositó sobre Illa una gigantesca responsabilidad, la de dirigir los esfuerzos de luchar contra la epidemia, pero no le asignó los recursos necesarios. El staff del Ministerio de Sanidad es relativamente corto porque todas las competencias están transferidas a las comunidades autónomas.
Ildefonso Hernández, exdirector general de Salud Pública en el Gobierno de Rodríguez Zapatero, recordaba en Antena 3 la gestión de la famosa epidemia de gripe A en 2009 cuando Trinidad Jiménez era ministra, y rememoraba jornadas de 20 horas de trabajo de un equipo directivo que era muy pequeño. Y en aquella época no les tocó administrar un estado de alarma.
Por no saber, en el Ministerio de Sanidad ya ni siquiera conocen los procedimientos para adquirir medicamentos y equipos. Desde hace casi 20 años no se dedican a eso. Así que, rápidamente se buscó a alguien que supiera cómo hacerlo: María Jesús Montero, la ministra de Hacienda, que además es médico y que organizó las famosas subastas de medicamentos en la Junta de Andalucía.
Trabajar con síntomas
En la conferencia de presidentes autonómicos que celebró el domingo 22, el presidente del Gobierno tuvo que escuchar un amplio repertorio de críticas, no sólo de las autonomías del PP. Finalmente tuvo que garantizar a las comunidades autónomas que Sanidad no interferirá en el futuro en sus compras de material básico.
Además de exponer gratuitamente a los médicos y enfermeras que forman la primeUD OtQHD GH FRQWHQFLyQ OR FXDO VH UHÁHMy HQ la tasa de contagios del personal sanitario en España (de los casi 40.000 contagiados el pasado martes, 5.400 eran profesionales sanitarios, con un aumento de 2.000 casos en 48 horas), en la segunda semana del estado de alarma surgió un nuevo indicador de saturación del sistema sanitario: seis hospitales de Madrid propusieron medidas que rebajaban los criterios de seguridad para evitar quedarse sin personal, según un informe conocido por el diario El Mundo. Así, los profesionales con sintomatología leve o los que estuvieran esperando el resultado de un test, podrían seguir trabajando para no mermar las plantillas.
La «mejor sanidad del mundo» daba claros síntomas de que estaba haciendo aguas ante el Covid-19, de la misma forma que «el VLVWHPD ÀQDQFLHUR PiV VyOLGR GHO PXQGRª OR KL]R HQ /D VLWXDFLyQ VH UHÁHMDED HQ los números. Al cierre de esta edición, España superaba a China en número de víctimas mortales con sólo la mitad de contagiados.
Una vez que el papel de Illa quedó reducido al de coordinador de la recopilación de datos sobre la enfermedad, el ámbito de actuación del Gobierno de Pedro Sánchez quedó delimitado por el área económica y la propaganda. El real decreto número 8 de 2020 sobre medidas económicas es un documento muy bien trabado que se puso en casi todas las situaciones que generará el estado de alarma.
El debate de fondo sobre el asunto -si DSOLFDU PHGLGDV GH FRQÀQDPLHQWR PiV GX ras y hundir más la economía o relajar las medidas y evitar una crisis profunda-, se extendió por todo el globo, pero también al
Consejo de Ministros español. De momento, Sánchez acordó renovar el estado de alarma por 14 días más, pero no endurecer el FRQÀQDPLHQWR
Hubo casos como el del presidente de Murcia, Fernando López Miras, que demandaba al Gobierno que agravara las medidas sin importar las consecuencias económicas. López Miras ha visto lo que está pasando en Madrid, uno de los sistemas sanitarios más extensos de España, y ha puesto sus barbas a remojar. Su sanidad no es tan poderosa y, si el número de contagios se dispara, su capacidad quedaría desbordada.
En cuanto a la propaganda, Sánchez hizo dos intervenciones en televisión bastante largas, de en torno a una hora cada una. En la del sábado tuvo momentos en que Sánchez buscó empatizar con la población, sobre todo con las familias que han perdido a seres queridos. Mencionó en dos ocasiones a quienes no se han podido despedir de ellos. Sin embargo, al día siguiente, domingo, Sánchez volvió a comparecer y, salvo por las cinco medidas que se acordaron en la conferencia con los presidentes autonómicos, volvió a repetir casi los mismos conceptos de la noche anterior. Esta insistencia pudo ser contraproducente.
Hubo una frase del presidente que resultó irritante. «Tenemos que seguir anticipándonos…», dijo, cuando una gran parte de la opinión pública considera que el Gobierno no quiso adoptar medidas difíciles antes del 8 de marzo, para no tener que actuar sobre la marcha feminista de ese día, y muchos expertos consideran que prácticamente se perdió el mes de febrero sin hacer acopio de material y de test.