Las economías emergentes son más vulnerables al brote. Estados Unidos, aunque ahora esté muy tocado, lo superará
También Inditex está siendo objeto de compras con esta visión, ante la impresión de que las pérdidas que el coronavirus pueda generar van a ser algo coyuntural, según Mirabaud Securities en España.
Asimismo, hay quien apuesta por arriesgar algo mas y entrar en compañías afectadas seriamente por el brote pero que no van a quebrar. «Porque la gente, al final, seguirá viajando y yéndose de vacaciones», según Ignacio Cantos, de ATL Capital.
En ese saco entrarían gigantes de la talla de Airbus que, no hay que olvidarlo, cuenta con la ventaja de que opera en régimen de duopolio con Boeing. «Airbus a la mitad de precio es una buena inversión. El avión no va a dejar de ser un medio de transporte», defiende Cantos. Otra compañía de estas características es Amadeus, una empresa tecnológica española que algunas gestoras han aprovechado para comprar estos días ante el desplome que ha sufrido debido a su fuerte exposición hacia el sector turístico.
En cuanto a la exposición geográfica, también hay bastante coincidencia entre los expertos: es deseable favorecer los mercados occidentales, con mayor sobreponderación de Estados Unidos; y poner en cuarentena a los emergentes. «Seguimos apostando por Estados Unidos. Va a tener ahora unos meses en los que lo va a pasar mal pero es una economía tremendamente dinámica, donde el empleo que ahora se está destruyendo muy deprisa se crea a la misma velocidad», opina Ignacio Perea, director de inversiones de Tressis.
En el ojo del huracán
En cambio, el Covid-19 ha pillado a las economías emergentes en baja forma. Además de la fragilidad de sus sistemas sanitarios, los desequilibrios económicos son elevados. «Los emergentes no se enfrentan a un horizonte nublado. Están frente a un huracán financiero a pesar de las últimas inyecciones de efectivo de la Fed y de las medidas que los gobiernos locales puedan tomar», avisa Pablo Duarte, del Instituto Flossbach von Storch Research.
Pero, ¿y qué pasa con España? Aunque existe poca visibilidad sobre la evolución que pueda vivir la bolsa española, parece que presenta una serie de problemas específicos. Por un lado, la enfermedad se ha cebado especialmente con la sociedad española. Por otro, la economía nacional presenta una elevada dependencia del sector turístico. Y, para terminar, el mercado local no cuenta con demasiados representantes entre los sectores que, a priori, lo van a hacer mejor. «Estar diversificado es especialmente importante para un inversor español en el escenario actual», aconseja López en relación con esto.
Si bien, siempre hay compañías que escapan a esa norma general. Algunas de ellas ya las hemos citado, como Inditex, Amadeus o Airbus. Pero también están en esa liga la farmacéutica catalana Grifols, Ferrovial, Cellnex, Arcelor y Acerinox, entre otras.