El estreno, previsto para este año, se aplaza por el coronavirus y se liga a la aprobación de los presupuestos del año que viene
El primer bono verde emitido por España todavía se hará de rogar. El director general del Tesoro, Pablo de Ramón-Laca, anunció en el foro ISR, organizado por INVERSIÓN, que la pandemia de coronavirus ha retrasado la primera incursión hasta el año que viene.
El plan del Tesoro es lanzar al mercado la primera emisión de deuda verde durante el primer trimestre del 2021. Su puesta en marcha está vinculada a que se aprueben los presupuestos generales del Estado, que incluyan partidas en las que invertir los fondos captados a través de estas inversiones.
Sin la irrupción del Covid-19, el objetivo previsto por el brazo de financiación del Estado era poner en circulación, a través de varias subastas, hasta 10.000 millones en este tipo de bonos a partir del tercer trimestre del 2020.
Este tipo de deuda servirá para crear una referencia líquida para el sector corporativo
Intensa actividad
A la espera de que España se estrene, De Ramón-Laca, repasó la intensa actividad de las empresas españolas en este mercado y recordó que también otras administraciones o instituciones que forman parte de la administración pública ya lo han probado. Entidades financieras como el Santander y BBVA fueron algunas de las pioneras en este tipo de emisiones, pero también se han sumado algunas autonomías, como Navarra y Madrid, y empresas públicas como el Instituto de Crédito Oficial (ICO). También compañías de otros sectores, como Telefónica.
En este sentido, De Ramón-Laca explicó que entre 2014 y 2019, en España se han llevado a cabo colocaciones específicas bajo el paraguas de lo verde por 31.000 millones de euros.
Buenas perspectivas
La actividad debería crecer con fuerza a lo largo de los próximos años, en paralelo al proceso de transición ecológica que se está impulsando no solo en España, sino en el conjunto de Europa. En concreto, se calcula que habrá que movilizar inversiones públicas y privadas por 2,6 billones dentro del Green Deal en el que trabaja la Unión Europea.
El salto del Tesoro al mercado de emisiones de deuda verde puede ser muy importante para las empresas españolas. Más allá del cambio cualitativo en el conjunto de la financiación de España, la subasta de este tipo de deuda servirá para crear una referencia «líquida», en palabras de De Ramón-Laca, para el sector corporativo.