Las apps de rastreo del Covid-19 no ponen fin a la pandemia

Parecía una solución razonable para seguir el rastro de este virus mortal, pero no se ha impuesto en ningún sitio

Amedida que se extendía el Covid-19, provocando en casi todos los países algún tipo de confinamiento, los gobiernos comenzaron a preguntarse cuál sería la mejor forma de seguir el rastro de este virus mortal. Las aplicaciones de rastreo de contactos se presentaron como una solución razonable.

Pero la tecnología no se ha impuesto en ningún sitio. En Francia, menos del 3 por ciento de la población se ha descargado StopCovid. El Reino Unido no cumplió con el plazo inicial de implantación y ha decidido volver a utilizar otra plataforma. Las aplicaciones de rastreo en los Estados Unidos se han visto inmersas en una guerra en los medios sociales sobre si las noticias sobre el virus son reales o falsas, mientras que la australiana COVIDSafe no ha detectado ni un solo caso pese a los 6 millones de descargas.

TraceTogether de Singapur fue una de las primeras en llegar, pero incluso el Gobierno ha empezado a distribuir tokens portátiles esta semana para complementar la aplicación. El único país con un mínimo de éxito ha sido China, pero solo porque las autoridades impusieron obligatoriamente el uso de la tecnología, implantando políticas de privacidad que serían inaceptables en cualquier otro lugar.

El valor de las aplicaciones de rastreo de contactos es «muy cuestionable», afirma Sean

McDonald, investigador principal del Centro para la Innovación en Gobernanza Internacional, un grupo de expertos independiente con sede en Canadá. «La ciencia subyacente de la proximidad como un buen indicador de la infección depende de muchísimas otras variables, como el uso de mascarillas o si estamos en interiores o en exteriores».

Tecnología digital

Las aplicaciones de rastreo de contactos utilizan smartphones para rastrear la ubicación de una persona, alertando a los usuarios si han estado en contacto con alguien que ha tenido la enfermedad. Están diseñadas como ayuda para complementar el enfoque tradicional y laborioso de rastreo de contactos, que implica que cientos de personas entrevisten a quienes hayan estado expuestos y recopilen minuciosamente información sobre lo que hicieron y con qué personas pueden haber estado en contacto. A falta de una vacuna, la tecnología digital se percibió como algo crítico para que la gente pueda volver lo antes posible al trabajo y que las economías vuelvan a la normalidad.

Las aplicaciones pueden utilizar datos de GPS o señales de Bluetooth. El Bluetooth es menos invasivo desde el punto de vista de la privacidad. La tecnología funciona enviando «saludos» electromagnéticos entre los te% SOBRE EL TOTAL DE LA POBLACIÓN. FUENTE: BLOOMBERG.