Agresiva: un 85% en renta variable y el resto en un fondo monetario

Para una cartera arriesgada, Arquia Banca propone un 15% en fondos monetarios, de muy bajo riesgo, que sirvan de reserva de liquidez para aprovechar las oportunidades que surjan y reducir la volatilidad de la cartera, y un 85% en fondos de renta variable que inviertan de forma global en los distintos mercados y sectores. Para Mar Barrero, directora de análisis de Arquia Banca Privada, la inversión en empresas de calidad, tengan sesgo growth (crecimiento) o value (valor), debería resultar rentable en cualquier entorno de mercado.

Entre los fondos globales de renta variable, Barrero elige tres. El T. Rowe Price Global Value, invierte en ideas de convicción (entre 80 y 100 compañías) que, en opinión del gestor, Sebastien Mallet, cuentan con valoraciones atractivas y con perspectivas de mejorar el crecimiento de sus beneficios. Aunque de filosofía value, tiene en cuenta las cambiantes condiciones de la economía, de modo que el equipo gestor se va a centrar en buscar empresas que sean capaces de seguir creando valor en el futuro.

El Arquia Líderes Globales invierte en compañías destacadas en sus respectivos mercados y con negocios con fuertes barreras de entrada, y el G Fund World (R) Evolutions, de Groupama, invierte en empresas que se encuentran al comienzo de su fase de crecimiento acelerado.

Junto a los fondos globales, Barrero propone diversificar con fondos de temáticas de crecimiento ligadas a la disrupción tecnológica (ciberseguridad, inteligencia artificial, robótica…), como el Fidelity Global Technology, y ligadas a la transición hacia una economía más sostenible, como el Nordea Global Climate & Enviroment y el CPR Invest Hydrogen.

Asimismo, fondos que inviertan en activos defensivos, como es el sector salud (BGF World Healthscience; Candriam Equities Oncology Impact), o en sectores más cíclicos que se beneficien del incremento de la inflación (JPM Global Natural Resources).

Dentro de la cartera de Arquia también tienen cabida fondos que inviertan en mercados emergentes, aunque en porcentajes que no superen el 10%. Ante la dificultad de determinar si los mercados emergentes que han brillado en 2022, como Brasil (beneficiado por el incremento de los precios del petróleo y las materias primas), también lo harán en 2023, la opción de Barrero es el Carmignac Emergents, un fondo global de gestión activa que cuenta tanto con exposición a Asia como a Iberoamérica.