Expansión Nacional - Sabado - Inversor
Vuelven los retornos a la renta fija
“Ya se pueden construir carteras con rendimientos positivos solo con bonos”, dicen los expertos
La deuda ha experimentado una mejora significativa de su rentabilidad esperada
Las gestoras y los selectores de fondos celebran la llegada de 2023 como el comienzo de una nueva época para la renta fija. Las continuas subidas de tipos de interés a lo largo de 2022 han cambiado por completo el tablero de juego y “ya se van a poder construir carteras con rendimientos positivos solo con renta fija”, decía esta semana la gestora de BBVA.
Para un inversor conservador que busque un fondo de renta fija para una parte estructural de la cartera, los expertos recomiendan apostar por fondos flexibles, en los que los gestores tengan capacidad para moldear la asignación de activos, según lo vean necesario, y sin límites por tipo de deuda o geografía. Francisco Julve, responsable de Selección de fondos de A&G, recomienda dentro de este estilo el Pimco GIS Income Fund, de la mayor gestora de renta fija del mundo, y el Jupiter Dynamic Opportunities, administrado por un equipo gestores con más de 20 años de experiencia.
La deuda ha experimentado una mejora significativa de su rentabilidad esperada y, ajustada por riesgo, destacan las perspectivas de los bonos de alta calidad crediticia europeos.
El Schroders Euro Corporate Bond y el Invesco Euro Corporate Bond son dos buenos productos con un histórico relevante. El fondo de Invesco invierte en bonos de alta calidad crediticia y ofrece una tir (tasa interna de rentabilidad) cercana al 4,5% con una duración de cuatro años. Este fondo es un clásico de la gestora estadounidense y del segmento, por su flexibilidad en la gestión. El 70% del patrimonio estará siempre invertido en bonos con grado de inversión, pero los gestores guardan alrededor de un 30% de la cartera para invertir, en función de las condiciones del mercado, bien en liquidez o bien en high yield. En las últimas semanas, han aprovechado la coyuntura para hacer muchas compras. Ahora, los gestores ven mucho valor en el sector financiero. De hecho, casi un tercio de la cartera está invertido en deuda de bancos y aseguradoras.
Para las posiciones de menor riesgo, ha ganado mucha popularidad en los últimos años un fondo de una gestora española, el Dunas Valor Prudente, que se sitúa un escalón de riesgo por encima de los fondos monetarios. Huye de las clásicas asignaciones de renta fija.
En realidad, es un fondo de retorno absoluto que utiliza coberturas y un enfoque multiactivos en la gestión. Este año, ha permitido al inversor reducir las pérdidas al 0,2% y se ha convertido en el producto estrella de la gestora para la parte de la cartera que el inversor quiere mantener sin correr prácticamente riesgo.
Más riesgo
Los inversores que deseen aumentar el riesgo de su cartera, pueden comenzar a incluir fondos de bonos high yield. En el nivel más bajo de riesgo dentro de este segmento de mercado destaca el Arcano
Low Volatility Income, que invierte en deuda de baja calidad, pero con duración corta, por lo que puede funcionar bien como complemento para las carteras que no deseen incluir mucho riesgo. Se trata de un fondo que ofrece duración al patrimonio, pero menos que los índices.
El inversor en renta fija deberá tener en cuenta a la hora de elegir su fondo, cuáles son las expectativas de movimientos de tipos de in
Los expertos aconsejan fondos flexibles, con capacidad para moldear la asignación de activos
El inversor deberá tener en cuenta cuáles son las expectativas de movimientos de tipos
terés. Por ejemplo, dentro del segmento de mayor riesgo de la renta fija, el de high yield, en un escenario en el que el mercado opine que no se producirán más subidas de tipos, una opción puede ser el Candriam Sustainable Global High Yield o el Robeco Global High Yield. Este último invierte en una cartera muy diversificada de bonos corporativos de emisores europeos y estadounidenses: alrededor de 230 emisores. Es un fondo con años de recorrido y un comportamiento positivo a largo plazo. En este momento ofrece tires cercanas al 8%.
Sin embargo, para los inversores que quieran entrar ya en un fondo high yield, sabiendo que los tipos de interés no han llegado todavía a su pico y los bancos centrales realizarán nuevos movimientos en los próximos meses, las opciones podrían ser el DWS Floating Rate Notes o el M&G Global Floating Rates High Yield. Invierten en bonos flotantes y el cupón se adapta y suaviza el riesgo de subidas de tipos. Esto es, están menos expuestos que otros fondos de renta fija a las decisiones de los bancos centrales.
Un ejemplo del resultado de esta estrategia es el comportamiento de estos dos fondos durante este año. Caen un 1% y un 6%, respectivamente, mientras la categoría sufre pérdidas de doble dígito, de entre el 15% y el 20%.