Expansión C. Valenciana - Jurídico
“El desarrollo de herramientas ‘legaltech’ puede servir para generar negocio”
El letrado se muestra convencido de la calidad de la oficina que dirige y quiere impulsar su crecimiento en los próximos años para posicionarse entre las seis principales sedes de Simmons & Simmons a nivel mundial.
Madrid
Eduardo Peñacoba asumió el puesto de socio director de Simmons & Simmons en España el pasado mes de enero. Desde entonces, poco a poco, ha ido dando pinceladas precisas para dibujar el futuro de la oficina madrileña. Su plan de negocio es claro: crecer tanto en facturación como en plantilla para ponerse a la altura de sedes de la firma como Milán o Ámsterdam.
“España se tiene que convertir en una de las seis oficinas más importantes de Simmons & Simmons, porque la madurez de nuestro mercado lo permite. Hemos duplicado nuestro tamaño en los últimos cinco años y espero que podamos volverlo a doblar en los próximos años. Mi objetivo es contar con 20 socios y alcanzar una facturación que se mueva entre los 20 y los 25 millones de euros”, explica. En 2021, cerraron el ejercicio con unos ingresos de 14,7 millones de euros.
El letrado es consciente de que, ahora mismo, el despacho que dirige es una oficina más de la firma internacional y por esa razón la quiere aupar a lo más alto. Para lograrlo, Peñacoba señala que Madrid tiene que convertirse en el nuevo hub de arbitraje y la oficina ser un punto de referencia para este tipo de asuntos. Por otro lado, el socio director afirma que debe reforzar las áreas clave del bufete: financiero, litigación, así como sectores como ciencias de la salud, laboral o bancario, así como TMT (tecnología, medios y telecomunicaciones).
En este punto, destaca uno de los aspectos que ha cambiado el despacho a nivel global: su apuesta por la innovación. El laboralista recuerda que Simmons & Simmons adquirió hace tres años Wavelength, una start up especializada en la creación de soluciones legales.
“Nuestra competencia, la que estaba ocupando las mejores posiciones, teniendo éxito y realizando grandes ventas en materia de legaltech, no eran despachos de abogados, eran start up tecnológicas. Simmons detectó entonces que una firma legal podía –debía– desplazarse hacia ese sector dominado por personas ajenas al Derecho”.
Según señala Peñacoba, desde la firma percibieron que este tipo de sistemas debían permanecer dentro del mundo del Derecho y ser un instrumento de mejora para sus abogados, así como para sus clientes. “La dirección del
FORMACIÓN
despacho comprendió muy pronto que el desarrollo de herramientas legaltech puede servir para generar negocio. Es una manera de reposicionar nuestra capacidad en el mercado y creemos que es un recorrido que tenemos que hacer y que, el que no lo haga, se quedará atrás”.
El socio director de Simmons & Simmons en España está convencido de que en la próxima década se volverá a hacer distinciones entre firmas y existirán las tradicionales, aquellas que hagan un asesoramiento estrictamente ligado al Derecho, y las vanguardistas, que serán las que hayan abrazado las nuevas tecnologías y, con ellas, ofrecer métodos innovadores y que racionalicen costes en todas sus transacciones.
Cambios en el sector
La tecnología también ha cambiado el funcionamiento del sector legal y ha generado cambios. Peñacoba destaca que “se han acelerado las tendencias de cambio en la sociedad y los despachos no somos ajenos” y menciona la llegada del teletrabajo y la casi desaparición de las reuniones presenciales como aspectos más importantes.
Sin embargo, el socio director también menciona como algo negativo la pérdida de interacción que estas nuevas formas han generado, ya que “las relaciones personales son la piedra angular de la formación de los abogados”.
EVOLUCIÓN
Mi objetivo es contar con 20 socios y alcanzar una facturación que se mueva entre los 20 y los 25 millones de euros”
El teletrabajo limita la interacción y las relaciones personales son la piedra angular de la formación de los abogados”