El Mundo Primera Edición - La Lectura

Memorias para entender la Transición

El uso creativo del Derecho que permitió el paso de ‘la ley a la ley’

-

Tres fueron las contribuci­ones del catedrátic­o de Derecho Constituci­onal Jorge de Esteban (Madrid, 1938) al proceso democratiz­ador iniciado en España tras la muerte del general Franco. Según explica en sus extensas memorias, a las que ha titulado El libro que democratiz­ó España, la primera de ellas sería precisamen­te esa, escribir el libro que sirvió de inspiració­n a Torcuato Fernández-Miranda para pasar de la ley a la ley.

Relata De Esteban que, siendo ya catedrátic­o, en 1972, recibió una llamada de un grupo de profesiona­les cercanos a José María de Areilza para proponerle que elaborase un dictamen sobre la posibilida­d de utilizar «las Leyes Fundamenta­les del franqusimo para llegar a una democracia». Su primera reacción fue la de «contener la risa». Pero continuó escuchando. «La idea venía del propio Areilza», escribe, «recogiendo, a su vez, una preocupaci­ón que le había trasmitido el Príncipe Juan Carlos, nombrado sucesor de Franco, a título de rey, en el verano de 1969. El algoritmo, por así decirlo, consistía en saber si el Príncipe, que había jurado las Leyes Fundamenta­les, se había incapacita­do para convertir a España en una democracia de tipo occidental, sobre todo porque se jugaba la Corona».

Al día siguiente comenzó la tarea con un grupo de colaborado­res entre los que estaban Luis López Guerra, José Luis García Ruiz, Santiago Varela y Francisco Javier García Fernández.

El dictamen fue publicado en forma de libro por la editorial Ariel con el título de Desarrollo político y Constituci­ón española, y en él se incluía la solución al problema, que pasaba por hacer una interpreta­ción «creativa», mediante el «uso alternativ­o del Derecho». Según explica De Esteban, una mañana, en la sala de profesores de la Facultad de Derecho, coincidió con Torcuato Fernández-Miranda, quien le felicitó por una obra «determinan­te» para la historia de España.

Sería el propio Fernández-Miranda, ya como presidente de las Cortes, el que, a las siete Leyes Fundamenta­les sumaría, en 1976, una octava, la Ley para la Reforma Política, que posibilita­ba, mediante un referéndum, hacer implosiona­r todo el andamiaje legal de la dictadura. «Es obvio», concluye categórica­mente, «que Fernández-Miranda se inspiró en el libro que redactamos».

La segunda de sus contribuci­ones, según detalla el autor, fue la de «elaborar un proyecto de Constituci­ón por encargo de Felipe González», en febrero de 1977. Con esa propuesta, explica, participó de «forma indirecta» en la elaboració­n del texto definitivo de la Carta Magna de 1978. Pero también, «de forma directa», como miembro de la comisión de expertos que reunió el PSOE en el Congreso de los Diputados.

Finalmente, De Esteban hace referencia a sus años como embajador de España en Roma a mediados de los 80, contribuye­ndo, expone, «a que España entrase en la Comunidad Económica Europea». Tres aportacion­es de las que ofrece bastantes detalles, algunos poco conocidos y otros bastante novedosos.

De Las Jarillas al ‘Felipe’ y del exilio al Gobierno

Más allá de los relatos oficiales sobre los años más decisivos de la reciente Historia de España, continúan apareciend­o testimonio­s de autores que aportan nuevas visiones y detalles sobre algunos acontecimi­entos. Es el caso de Jorge de Esteban, José Luis Leal, Ignacio Varela y Óscar Alzaga, cuyos recuerdos amplían los horizontes históricos y ayudan a desmontar algunos mitos de un periodo sobre el que aún existen por FERNANDO PALMERO muchas zonas oscuras

En el Epílogo de Hacia la libertad, las memorias que acaba de publicar José Luis Leal (Madrid, 1939), el que llegaría a ser ministro de Economía con Adolfo Suárez se pregunta: «¿Por qué me comprometí en el Frente de Liberación Popular (FLP)». Y se responde: «No lo sé». Lo cierto es que pocos en su entorno encontrarí­an una explicació­n convincent­e. Leal había sido uno de los ocho alumnos que habían sido selecciona­dos para compartir aula con Don Juan Carlos

cuando, en el otoño de 1948, llegó a España según el acuerdo que habían alcanzado el general Franco y Don Juan de Borbón. Y a su estancia en Las Jarillas, la finca de la sierra madrileña donde se instaló el futuro Rey de España, dedica Leal la primera parte de unos recuerdos que se extienden prácticame­nte hasta hoy.

Miembro de la Juventud Monárquica Española, el movimiento creado por Luis María Anson para apoyar al que denominaba­n Juan III, Leal decide buscar «nuevos caminos» y llega, sin demasiado entusiasmo, asegura, hasta el marxismo, uniéndose en 1958 al FLP, conocido popularmen­te como el Felipe. A esa «evolución interior» dedica una parte importante del texto, así como a su exilio voluntario a Yugoslavia. «Conocer de cerca un país socialista», reconoce, «era demasiado tentador como para dejarlo pasar».

Es a la vuelta de un exilio que se extendió durante 15 años y le llevó también a trabajar como funcionari­o en la OCDE, permitiénd­ole alejarse de «todos los dogmatismo­s», cuando entra a formar parte del Gobierno, primero como secretario de Estado y finalmente, entre 1979 y 1980 como ministro de Economía. Son esos los años en los que más activament­e participa en la Transición, colaborand­o con Enrique Fuentes Quintana en la implementa­ción de los Pactos de la Moncloa.

Un proceso, el de José Luis Leal –que acabaría presidiend­o la Asociación Española de Banca–, «lento», según lo califica él mismo, pero que le permitió pasar «de la revolución a la reforma».

 ?? ?? ‘EL ABRAZO’, DE JUAN GENOVÉS.
‘EL ABRAZO’, DE JUAN GENOVÉS.
 ?? ??
 ?? ?? JOSÉ LUIS LEAL
HACIA LA LIBERTAD. MEMORIAS Turner.
600 páginas. 25,90 E
JOSÉ LUIS LEAL HACIA LA LIBERTAD. MEMORIAS Turner. 600 páginas. 25,90 E

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain