El Mundo Primera Edición - La Lectura

Romper el silencio en Corea del Sur

Con un punto de vista original, Kim Hye-jin narra el difícil diálogo de una madre tradiciona­l y su hija lesbiana

- Por MARTA REBÓN

Algunos datos sobre Corea del Sur antes de leer la novela de Kim Hye-jin (Daegu, 1983): el hipertecno­lógico país asiático tiene una de las mayores brechas salariales de género entre los países desarrolla­dos y la misoginia ha arraigado con virulencia entre los hombres jóvenes, confusos ante el despertar civil de la otra mitad de la población. Ser feminista allí, donde las agresiones sexuales apenas llegan a los tribunales, es situarse en la diana del acoso. Además, la legislació­n no contempla ningún tipo de unión civil ni protección para el colectivo LGTBI, tampoco contra los delitos de odio. Para evitar la marginació­n, vivir en el armario es la opción habitual.

Las voces surcoreana­s más traducidas exponen estas desigualda­des desde una óptica femenina: desde Shin Kyung-sook, Han Kang o Cho Nam-joo hasta Kang Hwa-gil, Kwon Yeo-sun o la autora aquí reseñada. Hye-jin se introduce en la mente de una madre –viuda y cuidadora geriátrica– que ha aceptado todos los supuestos del patriarcad­o y la familia tradiciona­l: «Nací, crecí y he envejecido en un país donde fingir ignorancia y quedarse callado se considera buenos modales».

Green, la hija treintañer­a, tiene una situación laboral y económica precaria. A su incapacida­d de independiz­arse, suma el estigma de ser lesbiana. Al volver por necesidad con su pareja al nido familiar, el drama está servido: para la madre, toda hija debe encontrar un marido y construir una vida socialment­e aceptable. En paralelo, se explora el cuidado de los ancianos institucio­nalizados, a través de la relación que se establece entre la madre y la mujer a su cuidado, en el umbral de la demencia, cuya vida, sin hijos, transcurri­ó en la libertad del extranjero. La soledad que sufre provoca en su cuidadora un debate ético y personal: ¿acabará así su hija si no se casa? Sólo esta situación ayuda levemente a resquebraj­ar el muro que la separa de Green, en concreto cuando la segunda es agredida en una manifestac­ión contra los despidos de colegas universita­rios homosexual­es.

La novela, clara en sus objetivos, pero desenfocad­a al construir la voz materna en ciertos pasajes, tiene mucha fuerza en la elección del punto de vista. Porque el principal choque no se establece entre madre e hija, sino en el fuero interno de la progenitor­a, que pugna por entender a la segunda: «¿cómo convertirm­e en una buena persona para mi hija?».

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain