LAS INCREÍBLES INTIMIDADES QUE CUENTAN PARA ATRAER A LOS VOTANTES

Su táctica para captar votantes: contar que Irene usa copa menstrual, odia las aceitunas y le encantaría que le echaran las cartas o que Pablo se besaba con sus primas y que hacen colecho con sus hijos.

Pablo e Irene aspiran a ser

LA PATERNIDAD, el fracaso en las urnas, las críticas -e incluso el acosode sus enemigos dentro y fuera del partido truncaron la ambición política de Pablo Iglesias (45). También en parte la de su pareja y madre de sus tres hijos, Irene Montero (35) que, después de ser ministra de Igualdad, hoy aspira a algo más corrientito, que es ser diputada por Podemos y Ahora Repúblicas en el Parlamento Europeo.

Esta circunstancia, las inminentes elecciones, ha producido que ambos reaparezcan con fuerza en la prensa después de un tiempo en barbecho, ella desde la segunda línea política y él desde la barrera.

La estrategia electoral de Irene Montero, que presume de ser la némesis de Alvise Pérez, para conseguir su objetivo ha sido dulcificar su imagen y acercarse más a los jóvenes. Cometido en el que le está ayudando Pablo Iglesias, que ha asomado la cabeza desde su guarida para apoyarla públicamente.

Irene tiene ahora un discurso menos agresivo y se ha aplicado mucho en redes, hábitat en el que se mueve como pez en el agua. Tiktokera e instagrammer de éxito con más de 400.000 seguidores sumando las dos plataformas, es la candidata más buscada en Google, así que está logrando lo que quería. Aumentar su grado de conocimiento entre los votantes, sobre todo los jóvenes, y conseguir que la voten.

Para ello ha desvelado cosas de sí misma muy personales para acercarse a este tipo de público con menos pudor para hablar de ciertos asuntos e intereses distintos al votante de mayor edad. Aunque bueno, también ha metido la pata alabando en un vídeo electoral el colegio donde estudió, el Siglo XXI de Moratalaz, de educación concertada y no pública.

Su short en Tiktok titulado 10 cosas que seguramente no sabes de mí tuvo 24.000 likes y en él, en tono ciertamente influencer al puro estilo María Pombo, desveló detalles naïf como los siguientes: que le gustaba Quimi el de Compañeros a pesar de la relación “tóxica” que mantenía con Valle, que tiene tres tatuajes, que ama la serie Paquita Salas, que odia las aceitunas y los pimientos, que suspendió el carné de conducir a pesar de ser muy empollona, que tiene dos perritos adoptados -Rumba y Tirso-, que le encantaría que le leyeran las cartas del tarot, que sueña con irse de viaje con sus amigas a Colombia, que se queda dormida cuando ve seriesyquesubraya y escribe anotaciones cuandolee un libro.

En otras intervenciones con mediosamigos,ya que Irene Montero no se prodiga en los que no comulganideológicamenteconella, se ha abierto en canal, como con la educadora Pitu Aparicio, a quien contó que con la primera persona que habló cuando le vino la regla fue con su padre. Con ella charló de las bondade más ‘referencers’ que ‘influencers’. Ella controla más y mejor

las redes y se prodiga más en

Tik Tok e Instagram. Él es más de X. G3 Y RRSS

des de la copa menstrual y de que su madre era de la generacióncompresa, no de Tampax. Entre otros de los alardes de llaneza de Montero, fue especialmente celebrada su entrevista informal en Hora Veintipico, de Cadena Ser, presentado por Héctor de Miguel. Con él compartió un picnic improvisado y comentó que si tuviera tiempo de ir a un karaoke, aparte Sabina, cuyas canciones se sabe “todas”, se arrancaría con Pimpinela.

Llama la atención, por otra parte, que Irene ha explotado poco su faceta maternal en esta campaña comparado con antaño, cuando porteaba a su pequeña Aitana en público, quizás con la intención de no aburrir a ese votante joven. Sí que ha presumido de buen padre, en cambio, Pablo Iglesias hace unos días cuando fue entrevistado en el Huffington Post por el periodista David Andújar en su bar Garibaldi.

Pablo afirmaba que le encantaba estar con ellos y que a sus cinco y cuatro años (los gemelos Leo y Manuel y la pequeña Aitana) siguen haciendo colecho, léase, durmiendo toda la familia en la misma cama. A diferencia de Irene, contó que adora las aceitunas y que se enamoró perdidamente de la madre de sus hijos en cuanto la conoció.“Era lista, atractiva, guapa... A ella le caía mal, imagínate lo que me lo tuve que currar”.

Una de sus frases más comentadas fue la de su primer beso: “Primas aparte, me lo di jugando a eso de‘beso, verdad o atrevimiento’. Recuerdo esa primera vez que notas una lengua dentro de la boca...”.

También recordó su infancia ochentera de hijo único en Soria, siempre con su abuela y su tía abuela. Sus años 90 en Madrid, en la facultad de Políticas, de “borrachera en conciertos de Ismael Serrano, el Alejandro Sanz de las niñas progres”. En la entrevista, claro, hizo campaña por Irene, y también se declaró un hombre satisfecho y feliz fuera de la política. Dando clases, con su propio negocio y con la intención de abrir “una funeraria laica para gente de izquierdas”. Ahora, y lanza un aviso, asegura ser más poderoso que antes gracias a su medio, La Última Hora: “Al que nos haga daño, haremos todo lo posible por hacérselo aún más...”.

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