El Mundo Nacional - Weekend - La Otra Crónica
YA NO HAY MUJERES ADÚLTERAS; SON MUJERES APASIONADAS SIN CULPA
Luz Gabás y Cristina Campos, ganadora y finalista del Premio Planeta, presentaron sus novelas en el Instituto Cervantes, junto a Sonsoles Ónega y José Creuheras, presiente de la editorial.
Dos mujeres, distintos temas y mucho en común. En Lejos de Luisiana, Luz Gabás habla de la muy interesante y poco conocida historia de España como conquistadora de esa parte actual de Estados Unidos. Pero también de amores apasionados, mestizos, de empoderamiento femenino.
Cristina Campos, en Historias de mujeres casadas, desmitifica el adulterio en la mujer, siempre más castigado social y religiosamente que las infidelidades de los hombres, a los que alguna vez se les ponen medallas por sus hazañas extramatrimoniales (excepto al pobre Íñigo Onieva, condenado de por vida por un pecado venial al purgatorio, aunque el Papa haya dicho que tal lugar nunca ha existido).
Cristina Campos sustituye adulterio por pasión. Sus mujeres viven su pasión sin culpabilidad, mientras siguen queriendo a sus maridos.
Como la vida misma.
Navidad cada vez empieza antes. Hay turrones y mazapanes tentándonos en todas las tiendas y las luces, aunque sin encender, colgadas ya en todas las calles. Pero lo más navideño siempre ha sido el circo. Ahora ya no hay animales, y aunque algunos parecían famélicos, los llamaban fieras, una forma de darle morbo a un espectáculo siempre penoso, con los domadores dando latigazos y obligando a los pobres tigres y leones a hacer malabarismos.
Hasta que Emilio Aragón y su familia trajeron un circo diferente, inteligente y amable. Ahora, ha vuelto el Circo del Sol con Luzia, con reminiscencias mexicanas, música y canciones en vivo. A diferencia de funciones anteriores, hay tanto circo como acrobacia y un mimo muy divertido que nos recuerda a Fofito y compañía. El payaso es indispensable, siempre que sea para reírse con él y no de sus miserias.
En los estrenos siempre invitan a caras conocidas, como Carlos Baute con sus hijos. Rocío Flores posó en solitario para no coincidir en el photocall con Antonio David, su padre, y Marta Riesco. Está muy cambiada esta joven desde que se hizo famosa. Las operaciones de estética le han cambiado el físico y los palos que recibe en los platós han cortado su antigua espontaneidad, pero su mayor trauma, dicen, es tener una madre que la desprecia públicamente.
También vimos a Juan Diego Botto, director de En los márgenes, la última película de Penélope Cruz y Premio Max de teatro como mejor actor por Una noche sin luna, distinguida también como mejor espectáculo.
Pronostican que la burbuja gastronómica estallará cualquier día, pero no hay semana que no se abra un nuevo restaurante. El último, muy cerca de la casa donde vivía Carmen Franco, se llama Matto, que significa loco en italiano, aunque parece que la cocina solo merece alabanzas. Rocío Bacharach convocó para la apertura a gente importante, como el cónsul de Italia, Beatrice de Orleans y Alfonso de Hohenlohe, un nadador intrépido que batía marcas bañándose en aguas heladas, como las de los lagos de Covadonga.
De tal palo tal astilla, de padres excepcionales nacen dignos herederos. José María Castellano Ríos, el economista que hizo grande Inditex durante los 30 años que fue vicepresidente de Amancio Ortega, es el padre de otro José María, cardiólogo eminente y estrecho colaborador de Valentín Fuster, de fama mundial. Estos doctores han sido noticia internacional por su descubrimiento de la polipíldora para el corazón, que reúne tres medicamentos y es altamente efectiva para pacientes que han sufrido un infarto. Reduce el riesgo de nuevos amenazas de ictus y otro infarto. Un gran éxito de la investigación española.
Por su parte, Juan Abarca Cidón está al frente del Grupo HM Hospitales creado por su padre, Juan Abarca Campal, un extraordinario cirujano. Después de acabar Medicina, Abarca hijo estudió Derecho para gestionar mejor la empresa sanitaria y así la ha convertido en líder del sector, además de potenciar la fundación.
En uno de los salones del Ritz se concentró la flor y nata de la clase médica y la investigación, para la entrega del Abarca Prize o Premio Internacional de Ciencias Médicas y Científicas, que recayó en el profesor Philip J. Sansonetti, del Instituto Pasteur de París. Es un galardón que tiene resonancia internacional y muchos consideran el Nobel español otorgado por una entidad privada.