«Las comunidades autónomas le han salido muy caras a este país»
JORGE MONTES Director de la UNED Madrid Sur y coautor de «El libro de Historia del Seguro de Enfermedad en España»
«Los médicos terminan la carrera y no tienen trabajo. Es increíble que invirtamos en sanitarios y dejemos que se vayan»
JorgeJorge Montes –director de la UNED Madrid Sur–, Tomás Gómez y Eva Matarín presentan, a través de su obra de investigación «El libro de Historia del Seguro de Enfermedad en España» un recorrido desde el origen de estas polizas hasta una actualidad plagada de los retos sanitarios que ha traído la pandemia de coronavirus.
–¿Cuál es el origen del seguro de enfermedad?
–El libro surgió con la idea de conocer cómo han ido evolucionando los seguros de enfermedad. Tomás Gómez, que ya era doctor en Económicas, quería hacer el TFG de Derecho conmigo. Yo había encontrado que el seguro de enfermedad que se aplica en el franquismo con Girón de Velasco era el mismo proyecto que el encargado por Largo Caballero en la Segunda República. De ahí salió la idea. Para darle más actualidad, participa Eva Matarín hablando de la Covid. Este libro era muy oportuno, ya que lo que está ahora encima de la mesa es la sanidad pública. Una sanidad que se ha privatizado hasta tal punto que cuando ha llegado esta pandemia tan horrorosa hemos tenido que pagar el precio todos. El éxito del libro está en que lo puede leer cualquiera, no es para eruditos, son datos concretos para que el lector saque sus conclusiones.
–¿Cuál es el papel del seguro de enfermedad privado en el sistema de bienestar?
–En la democracia llegamos a tener la mejor Seguridad Social, y sigo pensando que la tenemos, pero cuando quienes nos gobiernan no creen en lo público han ido privatizando. Todas estas compañías sanitarias privadas que priorizan los beneficios han vivido mucho tiempo de lo que es Muface, de los funcionarios. Además, se planteó que no fuera compatible trabajar como funcionario en una clínica pública y luego dirigir una privada. Esto ha provocado que muchos abandonen la sanidad pública. Al final a todos nos tienta el dinero, aunque a algunos todavía les queda una mínima conciencia social.
–¿Qué utilidad han tenido los seguros de enfermedad durante la pandemia?
–La utilidad que ha tenido la sanidad privada durante la pandemia es acceder antes a los PCR, por un coste de 150 euros. Sin embargo, a la vez, no había PCR para la pública en el mes de abril. Durante la pandemia todo se ha convertido en un negocio. Los seguros privados de enfermedad no protegen contra los efectos de la Covid-19 y dependiendo del seguro que compres cubrirá ciertos tratamientos. Es el modelo estadounidense, que es muy gravoso para aquel que no tiene medios. Además, hay una opacidad absoluta en estas compañías.
–¿Los problemas de financiación del sistema sanitario público han impulsado estos productos privados?
–Absolutamente. Los médicos acababan la carrera y no encontraban trabajo, por lo que se han tenido que ir a clínicas privadas donde les pagan más. Es increíble que invirtamos en sanitarios y luego dejemos que se vayan. Ahora no tenemos ese capital. Si recortamos en sanidad y educación, ¿a dónde vamos?
–¿Dónde reside el problema?
–Las comunidades autónomas le han salido muy caras a este país al duplicar instituciones. La sanidad pública se transfirió a las regiones, pero su gestión depende de quién gobierne y salvo raras excepciones, la defensa de lo público ha sido nula.