La Razón (1ª Edición)

El desafío se vuelve en contra

Carles Puigdemont expresiden­te de la Generalita­t de Cataluña

- Pilar Ferrer

UnUn nuevo grano polí-tico polí-tico en las relaciones de Madrid con Cata-luña, Cata-luña, horas antes de que Pedro Sánchez recibiera en La Moncloa al presi-dente presi-dente de La Generalita­t, Pere Ara-gonés. Ara-gonés. El largo pulso que mantie-nen mantie-nen en Europa la Justicia española y Carles Puigdemont ha dado un nuevo giro con la publi-cación publi-cación de las conclusion­es del abogado general del Tribunal de la Justicia Europea, un informe previo a la sentencia final del TJUE que se alinea claramente con las tesis del juez español Pablo Llare-na Llare-na sobre la ejecución de las euroór-denes euroór-denes que pesan sobre varios po-líticos po-líticos catalanes imputados por el «procés». El fugitivo expresiden­te, que recibió la noticia en Bruselas con su abogado Gonzalo Boyé, y otros antiguos consejeros del Go-vern Go-vern como Lluis Puig, Toni Comín o Clara Ponsatí, reaccionó con vi-rulencia: vi-rulencia: « Lucharemos hasta el final por el ataque a nuestros de-rechos de-rechos fundamenta­les», asegura. Aunque el informe del abogado general no es vinculante, sus tesis pueden inclinar la balanza del ve-redicto ve-redicto final. De momento, el ór-dago ór-dago que mantiene el prófugo desde su huida de España le sale mal y se vuelve en su contra.

Pero según fuentes de su entor-no entor-no « El Puchi» no se rinde y piensa dar la batalla. En primer lugar por-que por-que el informe del abogado sienta bases pero no es concluyent­e, y en segundo porque Puigdemont goza todavía de la protección del Parla-mento Parla-mento Europeo, dónde es eurodi-putado, eurodi-putado, una cuestión que también está en los tribunales. Y una vez terminado el proceso sería de nue-vo nue-vo la justicia belga quien tendría la última palabra. A pesar de este duro revés, el ex presidente no se achanta: «Sabemos la intenciona-lidad intenciona-lidad política de este asunto y de-nunciaremo­s de-nunciaremo­s las contradicc­iones del informe del abogado con la propia jurisprude­ncia del TJUE», aseguran sus defensores, instala-dos instala-dos una vez más en el victimismo. Hasta el próximo septiembre no se espera una nueva reunión de la sala del tribunal europeo, lo que permitirá al ex presidente toda una campaña política y mediática contra «el estado español opre-sor opre-sor », en línea con la imputación de su mano derecha, Laura Borrás, que tampoco piensa dejar su cargo como presidenta del Parlament de Cataluña. « Hemos perdido una pequeña batalla, pero no la gue-rra», gue-rra», advierte el fugitivo desde su refugio en Waterloo.

Fuentes de su defensa aseguran que la última baza no está cerrada y recuerdan el caso del exconsejer­o exconsejer­o Lluis Puig, a quien la justicia belga mantuvo la inmunidad parlamenta­ria parlamenta­ria por estimar que en España no tenía garantías de un juicio imparcial, aunque ahora el abogado general europeo da toda la razón a Llarena. Un dardo que los abogados de Puigdemont quieren utilizar bajo la premisa de que los tribunales españoles no son legítimos ni neutrales. Para el expresiden­te todo ello es la prueba del «fascismo español» y acrecienta acrecienta su faceta victimista. Si finalmente finalmente prospera la extradició­n solicitada solicitada por el juez del Supremo, Pablo Llarena, Puigdemont debería regresar regresar a España y ser detenido para posteriorm­ente someterse a juicio. Un grano envenenado para ERC en plena batalla interna dentro dentro del Govern con sus socios de JuntsxCat, así como para Pedro Sánchez en sus pactos con ERC en el Congreso. En el entorno de Puigdemont lo tienen claro: no se rinde y recurrirá con todas las opciones opciones jurídicas en su mano. Nadie duda de que su regreso a España complicarí­a mucho el escenario político y aviva con fuerza el independen­tismo independen­tismo radical. Si triunfa el voto a favor, la decisión final queda en manos de la justicia belga y El Puchi volvería a España como el auténtico mártir del «procés».

Han pasado casi cinco años desde desde aquel mes de octubre de 2017 en que Carles Puigdemont despistó despistó a todos, huyó a Bélgica e instaló su corte en Waterloo. Como acusan acusan en ERC desde entonces «ha vivido como un rey», mientras su líder, Oriol Junqueras, permanecía en la cárcel. En todo este tiempo el fugitivo pisó temporalme­nte una prisión alemana, ha seguido incesante incesante en su reivindica­ción de la república catalana, logró ser eurodiputa­do, eurodiputa­do, utilizó como un títere a su sucesor, Quím Torra, observó satisfecho la ruptura de su antiguo partido, el PDECaT con la derrota de su antecesor, Artur Mas, articuló articuló la coalición JuntsxCat y batutó batutó los hilos del separatism­o. Rodeado Rodeado de un núcleo duro en el que figuran su íntimo amigo el empresario empresario Josep María Matamala, los ex consejeros Comín y Ponsatí, y con un «lobby» en Barcelona manejado manejado por los antiguos cargos de la Generalita­t, detenidos y luego puestos en libertad, David Madí y Xavier Vendrell, el fugitivo afirma que sigue siendo Mesías.

Con una discreta escolta que le acompaña día y noche, lleva una vida lujosa que, según su entorno, costea con su sueldo de eurodiputa­do eurodiputa­do y aportacion­es de amigos o empresario­s. Una elevada suma que pasa por los casi cinco mil euros de alquiler de la mansión en Waterloo, varios coches con conductor conductor y un reducido personal de servicio. En estos años de «exilio político», teledirige la línea dura de confrontac­ión con el Estado, mantiene el contacto con su familia familia en Girona, acude a la ópera, lee prensa extranjera y ha aprendido el idioma flamenco que une a su dominio del inglés, francés y rumano. rumano. Sus leales aseguran que jamás dará un paso atrás en la vía unilateral hacia la independen­cia y en los próximos días tiene previsto previsto convocar la Asamblea de Representa­ntes del Consell por la República, lo que él denomina su «gobierno en el exilio», para hacer frente a este revés judicial.

« El Puchi» vive como «un sibarita», sibarita», acusan en ERC. Para su entorno, entorno, sin embargo, una vida discreta discreta marcada por sus aficiones, la música, lecturas y buena comida. Acompañado de sus leales, entre los que figura el diputado flamenco flamenco Lorin Parys, suele acudir a cenar cenar al restaurant­e Pronto Tapas, ubicado en la vecina Lovaina, en cuyo escaparate lucen una gran estelada y fotos de los dos Jordis, Sánchez y Cuixart, en su día encarcelad­os. encarcelad­os. En su entorno admiten que se conecta casi a diario por videoconfe­rencia con su esposa, la rumana Marcela Topor, y niegan una separación de la pareja. Puigdemont prosigue con su «dolce «dolce vita» y piensa dar la lata.

 ?? ?? PLATÓN
PLATÓN
 ?? ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain