La Razón (Andalucía)

Espadas, cara de Gabilondo

- Julián Cabrera

LoLo saben en La Moncloa, en Ferraz, en los dos grupos parlamenta­rios socialista­s y en los cuarteles ge-nerales ge-nerales de las renqueante­s filas podemitas. Un descalabro de la izquierda como el que empieza a barruntar-se barruntar-se en los comicios andaluces que aguardan dentro de 38 días dejaría muy tocadas de ala las posibilida­des que aún baraja la guardia pre-toriana pre-toriana de Pedro Sánchez para conseguir tras las próximas y tal vez no tan lejanas elecciones generales una suma suficiente que permita la continuida­d en el poder.

Al candidato socialista Juan Espadas ya hacía hacía tiempo que se le había puesto cara de Ángel Gabilondo teniendo en cuenta las expectativ­as demoscópic­as de un PSOE andaluz, que empieza empieza a recordar lo ocurrido a los socialista­s madrileños alejados desde hace décadas del poder y sin levantar cabeza. Pero sobre todo no hace falta ser un lince para imaginar esa misma cara de Espadas contemplan­do la comparecen­cia comparecen­cia de este martes en La Moncloa, a cargo de la ministra de Defensa Margarita Robles Robles interpreta­ndo el «papelón» al que le obligaba obligaba la «sustitució­n» de la directora del CNI por la secretaria de Estado de Defensa en un patético ejercicio de derrape curva a curva para evitar la palabra «destitució­n».

Sánchez ha vuelto a pasar otro Rubicón de esos que amenazan puntualmen­te la estabilida­d estabilida­d de la Legislatur­a y su sillón, pero el negocio, negocio, aun siendo momentánea­mente rentable para los intereses de un Gobierno acosado por el ladrido independen­tista, dese luego no lo es tanto para los intereses electorale­s del socialismo socialismo andaluz, en una comunidad especialme­nte especialme­nte sensible a las concesione­s desde Madrid Madrid hacia la periferia nacionalis­ta. Las cuentas para la recuperaci­ón de San Telmo ya venían arrojando números rojos ante el acuerdo con Bildu para sacar adelante las medidas anticrisis anticrisis derivadas de la invasión de Ucrania y sobre todo la inclusión en la comisión de secretos oficiales de los herederos políticos de una banda banda terrorista que segó la vida de 121 andaluces. andaluces.

No es la melancolía socialista la única que embarga a la izquierda en esa comunidad teniendo teniendo en cuenta el fiasco por la imposibili­dad de Podemos para concurrir a estos comicios por un «papelito» no enviado a su tiempo. Yolanda Yolanda Díaz ya se ha ocupado de desmarcar a su «proceso de escucha» de todo lo relacionad­o relacionad­o con el «19-J», pero si se certifica la debacle en Andalucía, pocas plazas de tronío le van a quedar a una «caravana de escuchante­s» todavía todavía arrumbada y perezosa en los confortabl­es confortabl­es hangares del poder.

 ?? ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain