El Partido Poular y el mal menor
Confrontado a las consecuencias de su propia demagogia, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, abordó una de sus promesas electorales estrella, la derogación de la llamada « Ley Mordaza», desde un sano minimalismo que apenas retocaba algún aspecto menor de la legislación de seguridad aprobada por el último gobierno popular. De ahí, que sea perfectamente comprensible el apoyo brindado al Ejecutivo por el principal partido de la oposición para que la Ley de Seguridad pueda seguir su trámite parlamentario. La derrota gubernamental, cantada por el rechazo de sus socios de investidura, supondría, ciertamente, un mayor desgaste al Ejecutivo, pero con consecuencias consecuencias indeseables para la labor de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado si, a la postre, prosperaran las exigencias de Unidas Podemos y de los separaristas.