Dónde están los límites de la OTAN
► Durante casi treinta años, la Alianza no acogió a ningún nuevo miembro
¿Seguirá¿Seguirá la OTAN expan-diéndose? expan-diéndose? El presidente finlandés hizo pública su posición personal sobre la pertenencia de su país a la Alianza. El Partido Socialdemócrata Sueco anunció su decisión ayer. Fundada en 1949, la organización atlántica ha sufri-do sufri-do ya varias oleadas de ampliación. La OTAN se creó cuando la Unión Soviética impuso un bloqueo a Berlín. Los aliados occidentales trataron de organizarse para responder a la amenaza estratégica que suponía la URSS en aquel momento. La Alianza Atlántica estaba formada por doce miembros fundadores: Bélgica, Canadá, Dinamarca, Francia, Islandia, Italia, Luxem-burgo, Luxem-burgo, Países Bajos, No-ruega, No-ruega, Reino Unido, Portugal y Estados Uni-dos. Uni-dos. En 1952, Grecia y Turquía se unieron, se-guidas se-guidas por Alemania Occidental en 1955.
Luego, durante casi treinta años, la OTAN no acogió a ningún nuevo miembro. No fue hasta 1982 cuando España se unió a la or-ganización. or-ganización.
Después, la ampliación de la OTAN se aceleró bruscamente con la caída del Muro de Berlín del bloque del Este. Los territorios de Alemania Oriental se integraron en oc-tubre oc-tubre de 1990. En 1999, le siguieron Repú-blica Repú-blica Checa, Hungría y Polonia, todos ellos antiguos Estados satélites de la antigua URSS. Desde entonces, la OTAN, con Esta-dos Esta-dos Unidos a la cabeza, ha seguido una política de puertas abiertas. De hecho, en 2004, los países bálticos –Estonia, Letonia y Lituania–, Bulgaria, Rumanía, Eslovaquia y Eslovenia siguieron su ejemplo. Estos paí-ses paí-ses también son antiguos miembros del bloque del Este. Croacia y Albania se unie-ron unie-ron a la alianza en 2009. Por último, Mace-donia Mace-donia del Norte, que formaba parte de la Yugoslavia comunista pero no alineada, entra en la OTAN en 2020. Hoy sabemos que Ucrania, Georgia y Bosnia-Herzegovi-na Bosnia-Herzegovi-na han expresado su deseo de unirse a la organización.
Además, en esta política de apertura, la OTAN afirma respetar el derecho de cada país a elegir sus propios acuerdos de segu-ridad. segu-ridad. Es sobre todo en torno a esta cuestión donde cristalizan las tensiones entre los rusos y Occidente. Los rusos exigen la neutralidad de Ucrania, mientras que Occidente dice que se niega a permitir que se dicten las alianzas militares de un país.
Para ingresar en la OTAN, un país debe respetar los valores del tratado fundacional y cumplir ciertos criterios políticos (demo-cracia), (demo-cracia), económicos (economía de mercado) y militares. A la lectura de sus condiciones de adhesión, la OTAN parece ser mucho más que una alianza militar. De hecho, es una verdadera organización política que la propaganda rusa ha convertido en uno de los motivos de la invasión de Ucrania.
Ahora bien, la inclusión de los países del antiguo bloque del Este también plantea dudas sobre la conveniencia de ampliar la alianza. ¿No es un gran error de la política estadounidense posterior a la Guerra Fría? Parece que la expansión de la OTAN ha contribuido contribuido a impedir el desarrollo de la democracia democracia en Rusia, alimentando las tendencias nacionalistas, antioccidentales y militaristas militaristas de su sociedad.
Por su parte, el Kremlin, que pisoteó el derecho derecho internacional al invadir Ucrania, considera considera la expansión de la Alianza Atlántica como una humillación. Sin embargo, es imposible imposible saber si este sentimiento constituye el motor de la acción de Rusia o simplemente simplemente una herramienta de legitimación.
En este contexto, Finlandia y Suecia están tomando decisiones cruciales sobre sus candidaturas candidaturas a la OTAN. Los dos países nórdicos se encuentran a las puertas de la alianza militar occidental, en busca de su paraguas de seguridad contra la amenaza rusa.
Aunque Estocolmo se muestre más reticente reticente que Helsinki, Suecia solicitará su adhesión adhesión y probablemente lo hará junto con su vecino. Sorprendida por la rápida actuación actuación de Finlandia, Suecia –acostumbrada a sopesar largamente los pros y los contras– también tiene interés en pronunciarse, ya que el Ejército ruso tiene dificultades en el frente ucraniano.
La adhesión de Finlandia también duplicaría duplicaría la frontera terrestre de la OTAN con Rusia, hasta unos 2.600 kilómetros. En las últimas semanas, las repetidas advertencias de Moscú sobre las consecuencias políticas y militares de la adhesión, incluida la posibilidad posibilidad de enviar refuerzos nucleares al mar Báltico, han tendido a reforzar la determinación determinación sueco-finlandesa.
Dicho esto, Vladimir Putin todavía puede esperar a ver la bandera de la OTAN ondear sobre Helsinki y Estocolmo. Aunque la candidatura candidatura oficial de los dos países parece haber haber sido aceptada, es probable que la ampliación ampliación de la Alianza Atlántica tarde varios meses en concretarse: Croacia ya ha amenazado amenazado con vetarla. El hombre fuerte de Moscú parece tener cierto apoyo europeo, pero ¿por cuánto tiempo y a qué precio (del gas)?
► Los defensores de Azovstal en Mariupol siguen soportando los incesantes bombardeos de la aviación, la armada y la artillería rusas. Rusia usó ayer bombas de fósforo prohibidas para bombardear bombardear la acería sitiada. Moscú también golpeó un objetivo militar en Leópolis, a 15km de la frontera con Polonia, con cuatro misiles. misiles. En Lugansk, nueve personas resultaron heridas en Severodonetsk.