Obra Social, pilar del bienestar

Alberto Aza

EnEn una intervención en la Asamblea General de CECA, Antón Costas, presidente del Consejo Económico y Social, se refería a la Obra Social como el segundo pilar del estado del bienestar. Sin embargo, el último sondeo de CECA revela revela que la dimensión y alcance de la obra social siguen siendo relativamente desconocidos. La Obra Social es el conjunto de actividades de carácter benéfico-social que desarrollan las fundaciones adheridas a CECA y cuyo origen origen se remonta al siglo XVIII. Entre estas, sobre todo, las de carácter asistencial, pero también las relativas a la educación, investigación, promoción promoción cultural y, más recientemente, la protección protección del medio ambiente. La Ley 26/2013, de 27 de diciembre, de cajas de ahorros y fundaciones fundaciones bancarias, marca el punto de inicio de una nueva etapa para la Obra Social y las fundaciones. Desde esa fecha, la inversión de la Obra Social ha alcanzado un importe equivalente equivalente al 28,6% de los Presupuestos Generales Generales del Estado destinados a Servicios Sociales y Promoción Social durante el periodo: 6.172 millones que ha permitido situar a la Obra Social de las entidades CECA como el mayor inversor social privado de nuestro país. Al margen de su contribución económica al estado estado del bienestar, la Obra Social tambien lo complementa atendiendo aquellas necesidades necesidades que no pueden ser abordadas por el sector público, o de serlo, son atendidas de manera básica dadas las complejidades que suelen encorsetar las políticas públicas. La Obra social, social, libre de constreñimientos, puede actuar de manera más segmentada y ágil y de forma mucho más personalizada. Por eso, como respuesta al aumento de la desigualdad social, sus programas han priorizado la atención a los colectivos más vulnerables como las personas personas en riesgo de exclusión social, los mayores mayores de 65 años o la infancia y juventud. En 2021, estos colectivos concentraron el 60% de la inversión total, un porcentaje relativamente estable desde la reforma de 2014 y que, desde entonces, ha permitido llegar a más de 235 millones de beneficiarios. Por todo lo expuesto, expuesto, la Obra Social que realizan las entidades de CECA cumple un papel esencial en nuestra sociedad contribuyendo, de manera tangible, a su vertebración y cohesión.