La Razón (Andalucía)

Lunin cambia su suerte

► El portero ucraniano del Real Madrid ha vivido esta temporada la impotencia y la tristeza por invasión de Rusia y la falta de minutos. Pero va a ser padre y en Cádiz hizo su mejor partido

- José Aguado.

UnoUno de los primeros que felicitó a Lu-nin Lu-nin tras su gran encuentro en Cá-diz Cá-diz fue Courtois. Ambos trabajan bajo las órdenes de Llopis, con los papeles perfec-tamente perfec-tamente repartidos. El belga es el titular y el ucraniano es quien tie-ne tie-ne que esperar su oportunida­d, algo que no es sencillo, pero que Lunin, de 23 años, lleva con profe-sionalidad profe-sionalidad metódica ante el respe-to respe-to de sus compañeros. Por eso, la alegría por lo que se vivió en el úl-timo úl-timo encuentro de LaLiga fue compartida por todo el vestuario: por fin, el trabajo y la concentra-ción concentra-ción del segundo portero del equi-po equi-po se llevaba premio. Más que merecido siempre, pero con más sentido, más profundo este año.

Como todos los ucranianos que viven fuera de su país, Lunin sufre esa sensación imposible de trans-mitir. trans-mitir. Los primeros días de la inva-sión, inva-sión, tuvo que tomarse su tiempo y no estuvo en el partido contra el Rayo de finales de febrero: «Tenía una inflamació­n en el codo esta mañana, no podía mover el brazo. Solo es un problema médico, pero es lógico que esté afectado por lo que está pasando. Tiene personas cercanas en Kiev, pero su baja de hoy es sólo por un problema mé-dico», mé-dico», explicaba Ancelotti. Mien-tras, Mien-tras, intentaba ayudar a los suyos, aprovechan­do su popularida­d para que se mandasen alimentos y material a Ucrania, con los que intentar mejorar mínimament­e la vida bajo los bombardeos. Sorteó su camiseta firmada por todos los jugadores de la primera plantilla para recaudar dinero: «¡La guerra significa el horror! Es extremada-mente extremada-mente difícil expresar con pala-bras pala-bras mis preocupaci­ones y temo-res temo-res cotidianos por la familia y nuestros ciudadanos, que ahora están en Ucrania. Esperamos ga-nar ga-nar y volver a la vida normal, y hasta entonces haremos todo lo posible para ayudar a nuestros héroes con munición, protección, suministro­s médicos y alimenti-cios, alimenti-cios, y dinero», escribía en las re-des re-des sociales.

Si la vida de un portero suplente ya es complicada, porque tiene que entrenar con quien le quita el puesto, estos meses para Lunin, lejos de su país y viendo cómo era masacrado por Rusia, han sido terribles. Apoyado por el vestuario y por el club, el futbolista casi siempre se ha mantenido en un silencio serio. « Hacemos lo que podemos», fue su única frase recogida recogida por Gol a la salida de un entrenamie­nto.

Como muchos otros deportista­s de Ucrania ha seguido con tristeza y rabia las noticias que llegaban de su país. Lunin salió de Ucrania en junio de 2018 cuando fichó por el Real Madrid, pero sin minutos, el club blanco decidió que se foguease foguease en Leganés, en Valladolid y en el Oviedo, donde fue para ser titular titular y por fin tuvo los minutos que él y el Real Madrid buscaban.

En todos los equipos por los que ha pasado ha dejado la misma huella: la de un futbolista que trabaja trabaja a destajo. En algún club saltó la valla del recinto deportivo en los días de descanso para seguir ejercitánd­ose ejercitánd­ose y no perder la forma física. física. Es un futbolista que considera considera que cuando no se juega, se tiene que trabajar el doble para intentar hacerse un sitio y eso lo ha llevado hasta el extremo en el Real Madrid, donde sólo esta temporada y con LaLiga ya decidida ha podido tener tener minutos. Y ha conseguido demostrar demostrar que es un portero válido para el primero equipo y para dar descanso a Courtois.

Ayer, los mensajes en su Instagram, Instagram, que durante los últimos meses iban dedicados a pedir ayuda ayuda para Ucrania, se cambiaron por stories de sus paradas del partido del domingo ante el Cádiz. La foto

En todos los sitios por los que ha pasado ha dejado huella de ser un trabajador metódico

que mandaba era su larga estirada para despejar el penalti que lanzó Álvaro Negredo y que tenía que haber sido el de la derrota del conjunto conjunto blanco. Lunin lo despejó y luego corrió hacia la esquina del área, hacia donde iba el balón para volver a quitárselo de la pierna a un futbolista rival. « Penalty para ti @a.nastasica y nuestro pequeño . Os quiero», se leía en sus redes sociales.

Se lo dedicaba a su pareja y al niño que pronto van a tener. Ella luce embarazo en Instagram y también en la celebració­n de LaLiga LaLiga en el Santiago Bernabéu. Por lo que han publicado, ha sido Lunin Lunin el que se ha encargado de pintar pintar y preparar la habitación para el bebé que esperan dentro de muy poco.

Es probable que ayer, como hace siempre, se dedicara a repasar repasar varias veces el encuentro que disputó en Cádiz, para repasar errores, mejorar y pelear, también, contra la mala suerte.

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El ucraniano Lunin está viviendo los mejores minutos deportivos desde que llegó al Real Madrid
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