Las inquietudes europeas sin «Super Mario»
► Las reformas han avanzado, pero Italia no se ha convertido en otro país. Continúa siendo el «enfermo» de la Unión Europea
ApodadoApodado «Super Mario» por las plazas financieras cuando dirigía el Banco Central Europeo, el pri-mer pri-mer ministro italiano Mario Drag-hi Drag-hi ha dimitido. Conocido por su agudo sen-tido sen-tido de la responsabilidad política y financiera, la salida del «Condotiere» pre-ocupa pre-ocupa no sólo a los italianos sino también, y sobre todo, a los europeos. Los motivos y las consecuencias de este acontecimiento pue-den pue-den sacudir toda la zona del euro. En efecto, al anunciar su dimisión el jueves pasado, Draghi hizo temblar a Europa y a los merca-dos, merca-dos, que entraron en pánico al ver que el coste de la deuda pública italiana se dispa-raba dispa-raba casi instantáneamente. Su dimisión llega en el peor momento para Italia, que debe reducir su dependencia del gas ruso y llevar a cabo difíciles reformas para recibir fondos del plan de recuperación europeo.
La recomposición del paisaje político ita-liano ita-liano va a ser difícil, dadas las reglas electo-rales electo-rales vigentes. Las elecciones, que tendrán lugar en septiembre, abren la posibilidad de una gran variedad de coaliciones. Esta crisis es sin precedentes y las consecuencias eco-nómicas eco-nómicas y financieras son inciertas. Los alia-dos alia-dos de Draghi le han abandonado. El Partido Democrático de Enrico Letta es el único que se ha mantenido fiel a él. Durante meses, la coalición de unidad nacional ha estado pla-gada pla-gada de graves desavenencias. Ante la proxi-midad proxi-midad de las elecciones legislativas, previstas inicialmente para la próxima primavera, cada partido quería recuperar cierta autono-mía. autono-mía. En primer lugar, la Liga de Matteo Sal-vini, Sal-vini, preocupada por el prodigioso ascenso en las encuestas del partido rival de extrema derecha, Hermanos de Italia. Ha obstaculizado obstaculizado constantemente los intentos de Draghi de reformar el sistema de pensiones o liberalizar liberalizar la economía. Luego, el Movimiento Cinco Estrellas, que está en plena crisis. Víctima Víctima de repetidos reveses electorales, el partido partido va a la deriva. Desafiar a Draghi le permitió permitió reunir a su base electoral, que sentía que sus temas favoritos estaban siendo descuidados descuidados por el gobierno. Por último, la Liga y Forza Forza Italia de Silvio Berlusconi, Berlusconi, conscientes de que la intención de voto es mayoritariamente favorable al centro-derecha, centro-derecha, han decidido aprovechar la oportunidad oportunidad de la crisis para anticipar unas elecciones que creen que pueden ganar con creces.
La derecha es la favorita, pero también está dividida. Forza Italia está en pleno declive y se estanca por debajo del umbral del 10%. La Liga de Salvini también está en fuerte descenso, descenso, ahora con un 17%. El partido postfascista postfascista Hermanos de Italia, dirigido por Giorgia Meloni, está en alza. Es el único partido que se ha mantenido en la oposición durante la experiencia del gobierno de unidad nacional de Draghi, y el que tiene mayor intención de voto en las encuestas (22%). Meloni podría convertirse así en la primera mujer presidenta presidenta del gobierno.
El sistema político italiano italiano es factor de inestabilidad inestabilidad política porque radica en el temor, tras el fascismo, de ver a un partido dominar completamente completamente el país. Desde Desde 1945, la vida media de un gobierno italiano italiano ha sido de trece meses. Esto se explica, por un lado, por el hecho de que el Senado tiene exactamente tantos poderes como la Asamblea Asamblea Nacional, lo que es una fuente de bloqueo. bloqueo. Por otra parte, el mecanismo de elección elección de diputados y senadores favorece la fragmentación de las fuerzas políticas. Una reciente reforma electoral no fue suficiente para disuadir a los partidos más pequeños de una coalición de gobierno –la dirigida por Draghi contaba con ocho partidos– de salir al menor pretexto con la esperanza de ganar fuerza en las siguientes elecciones parlamentarias. parlamentarias. Además, «Súper Mario» contaba con el apoyo de la mayoría de los representantes representantes electos, pero la coalición era ecléctica, formada por partidos de izquierda y de derecha. derecha. Por lo tanto, su mandato no estaba claro. Las reformas han avanzado, pero Italia no se ha convertido en otro país y sigue siendo siendo el «enfermo» de la Unión Europa. Si una coalición despilfarradora y euroescéptica llega al poder, no cabe duda de que el enfermo enfermo podría perjudicar sus funciones vitales.
Más preocupante aún es el hecho de que la dimisión del primer ministro podría señalar señalar el debilitamiento de la coalición occidental occidental contra el Kremlin. Su salida es aparentemente aparentemente una buena noticia para Vladimir Putin. Draghi fue uno de los principales líderes líderes de la coalición occidental contra Rusia, Rusia, y uno de los menos ambiguos. Su firmeza firmeza quedó patente con las entregas de armamento pesado que igualaban los recursos recursos del Ejército italiano, un compromiso aún más notable si se tiene en cuenta que Roma mantenía estrechas relaciones económicas económicas con Moscú, especialmente en lo que respecta al suministro de gas. Ahora bien, es poco probable que su sucesor abandone abandone su línea de solidaridad con Kyiv, excepto excepto quizás si pertenece al partido de extrema extrema derecha Hermanos de Italia.
La recomposición del paisaje político italiano será muy difícil