La Razón (Andalucía)

La Cetrina: la (difícil) venta de la finca de la discordia

Ana Soria quiera dar salida ya a un lugar que tiene la firma de Paloma Cuevas en cada rincón. Mientras, se alquila para eventos

- Paloma Barrientos.

La finca La Cetrina en Navas de San Juan (Jaén) ha sido el lugar de las celebracio­nes familiares. Tanto por parte de los Ponce como de los Cuevas. Allí han celebrado celebrado los cumpleaños, las primeras primeras Comuniones de las niñas, recibían a los amigos e incluso fue el lugar donde parejas (ahora ya separados) como Adriana Carolina Carolina Herrera y el Litri se conocieron. conocieron. Para Genoveva Casanova Casanova y el cantante Luis Miguel fue también el campo secreto donde vivieron su relación.

El torero había pasado el confinamie­nto confinamie­nto en la finca La Cetrina con su mujer, sus hijas y los suegros suegros en un ambiente familiar sin tensiones. Al menos así los transmitía­n los protagonis­tas de la historia cuando hablaban con periodista­s durante el Estado de Alerta. Cuando se publicó la noticia noticia de la existencia de Ana Soria con lo que supuso de noticia inesperada inesperada y desapareci­ó la cuarentena cuarentena cambió la situación. El torero se marchó del que había sido el hogar conyugal y alternativ­o alternativ­o al domicilio de Madrid para vivir el nuevo capítulo amoroso de su vida que dos años después se mantiene. Tanto así que es muy posible que el 2022 sea el año en que definitiva­mente el torero y la estudiante de Derecho den por finalizado su noviazgo y pasen a la siguiente fase que sería sería el matrimonio como sería la cronología habitual. Habrá que esperar.

Una vez solucionad­o el divorcio divorcio Ponce decidió que no tenía mucho sentido seguir con el mantenimie­nto de una finca donde Ana Soria no tenía ninguna ninguna intención de vivir. A los 22 años encerrarse en el campo por mucho amor que tuviera a Ponce no era negociable. Entre otras cosas por todas las reformas y decoración de la casa y el entorno entorno llevan la firma de Cuevas. Hasta tal punto que los invitados fijos tenían su propia ropa de cama y baño personaliz­ada con sus iniciales. Detalles de este tipo que hacían de La Cetrina un lugar de ensueño.

El divorcio trajo consigo el fin del que había sido el buque insignia de Ponce que compró con el primero primero dinero que gano. Una finca finca de más novecienta­s hectáreas con olivos, ganado, toros bravos, sementales, vacas nodrizas y vacuno vacuno de cebo con el que se mantenía mantenía el campo de recreo que contaba con piscina, capilla, pabellones, pabellones, una plaza y la réplica exacta de la puerta de la plaza de la Maestranza de Sevilla como acceso principal. Una casa tipo cortijo de tres plantas cada una de cuatrocien­tos metros cuadrados. cuadrados. Un sueño al alcance de pocos. pocos.

5.000 euros al día

Cuando Ponce comenzó a despuntar en los carteles taurinos taurinos y aún no había comenzado comenzado su relación con la hija del gran Victoriano Valencia, Valencia, quería ser como el resto de sus colegas ya consagrado­s. Su primera ilusión era el Mercedes y así se lo hacía saber a su apoderado, apoderado, Juan Ruiz. Con buen criterio a la hora de plantear inversione­s inversione­s a largo plazo, su hombre hombre de confianza le dijo: «primero «primero el campo y después el coche». Y así fue.

Lo que en principio era una casa de labranza se fue adecuando adecuando al nivel económico del torero hasta convertirs­e en un palacio en medio de campos de olivos. La Cetrina no formaba parte de los gananciale­s y por lo tanto no se cuestionó su propiedad a la hora de la separación y división patrimonia­l.

La Cetrina está a la venta. Enrique Enrique Ponce quiso ir ligero de equipaje, una vez que cerró el capítulo emocional más importante importante de su vida. El precio que se ha barajado, y que el dueño nunca nunca ha confirmado públicamen­te, oscila entre los tres y cuatro millones millones de euros. La propiedad no se publicita en ninguna inmobiliar­ia inmobiliar­ia y está en venta privada. Mientras aparece el comprador, que no es el cantante mexicano Luis Miguel como su representa­nte representa­nte ha confirmado a LA RAZÓN, se alquila para bodas, bodas, banquetes y eventos a razón de cinco mil euros al día. Los dueños de los paraísos paraísos también ponen el cartel cartel de cerrado.

Los invitados tienen personaliz­ada la ropa de cama con sus iniciales, detalles que no gustan a Ana

El precio de la propiedad, que no necesita reforma, ronda los cuatro millones de euros

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El torero Enrique Ponce, dueño de la propiedad
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