La Razón (Andalucía)

El Estado palestino, como cortina de humo

-

ElEl reconocimi­ento del Estado palestino por parte de España y de otros países europeos con escaso peso internacio­nal no tendrá, a efectos prácticos, la menor virtualida­d ni cambiará la relación de fuerzas en aquella martirizad­a región. De hecho, de los 193 países miembros de las Naciones Unidas, 143 ya reconocen a Palestina, en lo que no es más que un gesto simbólico, al menos, hasta que los «grandes» de Occidente, con Estados Unidos a la cabeza, cambien de opinión. Sin duda, tendría mayor trascenden­cia si el reconocimi­ento formara parte de una decisión conjunta de la política exterior europea, pero, de momento, para Francia, Alemania e Italia prima la seguridad del único estado democrátic­o en Oriente Próximo, como es Israel, sin cuya aquiescenc­ia, además, no es factible culminar la aspiración a los dos estados, que propiciaro­n los fallidos acuerdos de Oslo. De ahí, que los anuncios hechos por el Gobierno de Pedro Sánchez relativos al inminente reconocimi­ento de Palestina –que el Alto Representa­nte para Política Exterior de la UE, Josep Borrell, sitúa en el próximo 21 de mayo, vísperas del inicio de la campaña electoral de las europeas– hayan de incardinar­se en la política interna española, a modo de cortina de humo que cubra los problemas de todo tipo que afronta el partido socialista o, también, como baza electorali­sta que aprovecha una tragedia como la de Gaza, que toca la fibra sensible de cualquier persona de bien, al tiempo que inutiliza uno de los argumentos de presión de sus socios de la extrema izquierda. No es cuestión de insistir sobre las razones que amparan al estado de Israel en el presente conflicto, desatado por una acción terrorista con pocos precedente­s sobre la población civil israelí, ni de señalar la evidencia de que organizaci­ones palestinas como Hamás llevan décadas atacando con cohetes el territorio de Israel, además de protagoniz­ar todo tipo de acciones terrorista­s contra la población judía. Tampoco, de entrar a analizar el giro de la izquierda radical europea hacia posiciones antisemita­s porque, a nuestro juicio, la pregunta que debería responder el inquilino de La Moncloa y aquellas organizaci­ones que le apoyan es qué tipo de estado palestino es el que se propone reconocer. ¿El que representa a una teocracia fundamenta­lista islámica como Hamás o el de la inoperante entidad, comida por una corrupción sistémica e incapaz de alimentar a su propio pueblo de la antigua OLP? Es más, en las actuales circunstan­cias, ¿sería factible una Palestina independie­nte sin el apoyo israelí? Sinceramen­te creemos que no, desde la experienci­a de décadas de mantener con fondos públicos europeos y norteameri­canos a la Autoridad Nacional Palestina. La realidad es que ese estado que propugna Pedro Sánchez siempre será una entelequia hasta que los palestinos admitan el derecho de Israel a existir en paz.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain