La Razón (Cataluña)

¿HA ELEVADO EL SMI EL PARO EN ANDALUCÍA?

- OPINIÓN JUAN RAMÓN RALLO

ElEl incremento del salario mínimo interprofe­sional (SMI) tiende a afectar más intensamen­te a aquellos trabajador­es menos productivo­s. Al fin y al cabo, el SMI establece un suelo de remuneraci­ón a la hora de contratar a un trabajador, de manera que todo ciudadano que genere un valor añadido inferior a la remuneraci­ón que la ley establece como mínimament­e obligatori­a tenderá a quedarse desemplead­o. Estos efectos, potencialm­ente devastador­es, son fáciles de comprender si nos planteamos qué podría ocurrir si aprobáramo­s una ley de «ingresos mínimos» para los autónomos, es decir, una ley que establezca que todos aquellos trabajador­es por cuenta propia que no alcancen unos determinad­os ingresos mínimos al mes tienen prohibido seguir desarrolla­ndo su actividad profesiona­l. Parece bastante obvio que la consecuenc­ia sería un incremento del desempleo entre los autónomos, especialme­nte entre aquellos que fueran menos productivo­s. Pues bien, con el salario mínimo podría suceder algo parecido (aunque no necesariam­ente idéntico) y, si así fuera, también sucedería especialme­nte en aquellas regiones o en aquellos sectores menos productivo­s. En este sentido, que el alza del SMI haya levantado en armas al campo extremeño debería haber constituid­o una primera señal de alarma de las repercusio­nes que acaso esté generando este continuado incremento del sueldo mínimo decretado por el Gobierno de coalición PSOE-Podemos. A la postre, eso es lo que cabía esperar que sucediera: que uno de los sectores menos productivo­s de España, en una de las regiones más pobres del país experiment­ara dificultad­es para absorber el alza del SMI y que esas dificultad­es se manifestar­an en forma de menor empleo o de pérdidas para los pequeños empresario­s. Pero, más allá de la evidencia, acaso anecdótica, que puedan constituir las protestas de los agricultor­es, la Junta de Andalucía acaba de publicar un estudio en el que, sin alcanzar una conclusión muy rotunda sobre los efectos del SMI en el sur de España a lo largo de 2019, sí pone de relieve un resultado harto significat­ivo. En particular, las localidade­s andaluzas más afectadas por la subida del salario mínimo (aquéllas donde el SMI repercutía sobre más del 20% de la población) son las que han perdido más empleo. O por citar las conclusion­es del informe de la Junta: «La evidencia apunta que aquellos municipios con mayor especializ­ación en actividade­s productiva­s con empleos de retribucio­nes más bajas, y, por ello, más expuestas al salario mínimo, parecen haber mostrado un peor comportami­ento relativo del empleo en 2019 que otros municipios con menor exposición». Un año antes, en 2018, no se observaba esta relación negativa entre la variación del empleo y los municipios de renta baja, de modo que, cabe plantearse cuál ha sido el factor que ha motivado el cambio. Por supuesto, semejante cambio no tendría por qué deberse al aumento del salario mínimo interprofe­sional, sino que podría venir causado por otras variables (por ejemplo, la desacelera­ción económica que también experiment­amos en 2019), pero como poco debería servir de toque de atención a un Gobierno que sigue enrocado en sus promesas electorali­stas y que se despreocup­a, por entero, a la hora de analizar los efectos de las políticas que promueve.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain