Las claves
La legislación es clara
al estipular que la autoridad durante el estado de excepcionalidad corresponde al Gobierno central y que solo puede transferirse cuando la alarma se circunscriba a una región concreta, que no es el caso.
Expertos consultados
aseguran que la legislación ha quedado obsoleta desde 1981 ya que en aquel periodo de nuestra historia el Estado de las autonomías apenas se había desarrollado jurídicamente.