Barcelona y su área metropolitana darán el lunes la bienvenida a la fase 2
TRAS LA LUZ VERDE DEL GOBIERNO, casi el 70 por ciento de la población catalana pasa a tener los numerosos «privilegios» que facilita seguir avanzando en la desescalada. La medida incluye a Lleida
Barcelona pasará el lunes a la fase 2 de la desescalada de la crisis del coronavirus. También Lleida, que ha tenido que esperar una semana a dar el salto tras detectar un minirebrote en una fiesta de cumpleaños ilegal en la que se infectaron 20 invitados y en algunos mataderos. Lleida, Barcelona y su área metropolitana se suman a las regiones sanitarias de Girona, Cataluña Central y las comarcas del Alt Penedès y el Garraf, que hace una semana que gozan de los privilegios de esta nueva fase y que se mantendrán unos días. Las regiones del Camp de Tarragona, Terres de l’Ebre y los Pirineos pasarán a la fase 3 como hará la mitad del país.
El Gobierno aceptó la propuesta del departamento de Salud, que daba por controlado el brote de casos positivos que se había detectado en la región sanitaria de Lleida. Los números confirman que ha habido una bajada de la incidencia de casos. Mientras que el 21 y 29 de mayo, había 38,4 casos por cada 100.000 habitantes, entreel 28 de mayo y el 3 de junio, se han detectado 25,4 casos por cada 100.000 habitantes.
El avance a la fase 2, dará un respiro a las familias con hijos en las que los padres no tienen la opción de teletrabajar, y a la hostelería. Lleida, Barcelona y a su área metropolitana, donde está permitida la movilidad entre municipios municipios desde este lunes, podrán abrir guarderías y escuelas. Pero aunque tienen el permiso, muchos centros no tienen listo el protocolo de apertura que cada escuela debe elaborar para reabrir. Por lo que sopesan retrasar el regreso de los niños a las aulas al día 15.
Aunque aún no pueden afirmarlo con rotundidad, pediatras como el doctor Pere Soler, jefe de Patología Infecciosa de Pediatría del Hospital Vall d’Hebron, o Quique Bassat, que además es epidemiólogo del Instituto de Salud Global de Barcelona (ISGlobal) y del Hospital Sant Joan de Déu, dicen que el riesgo de llevar los niños a la escuela es mínimo. Partiendo de que el riesgo cero no existe, la decena de ensayos que han estudiado la enfermedad en niños sugieren que no son grandes contagiadores como se creía y que es más seguro abrir los colegios que dejar a los menores con los abuelos, que son grandes receptores de la COVID-19.
La experiencia de Dinamarca, el primer país que abrió los colegios en Europa durante la pandemia muestra que la vuelta a las aulas no ha aumentado los contagios. Por cautela, los dos pediatras recomiendan ventilar las aulas, el lavado de manos y trasladar las actividades al exterior.
Muchos bares y restaurantes de Barcelona optaron por esperar a la fase 2 para abrir. A partir del lunes, los clientes podrán entrar al interior de bares y restaurantes, aunque no se podrá consumir en la barra, sino solo en las mesas. El aforo permitido será del 30 por ciento.
En esta fase de la desescalada, también reabrirán los centros comerciales, pero lo harán con limitaciones: el aforo estará al 40 por ciento, y habrá un horario preferente para mayores de 65 años. Además, y a favor de un sector muy perjudicado por la situación, vuelven teatros, cines y auditorios con butaca asignada y un tercio de su aforo.