De qué estamos hablando
De que las autoridades británicas se están viendo obligadas a proteger los monumentos públicos, ante la amenaza de los movimientos antiracistas de dañarlos. La estatua del ex primer ministro británico Winston Churchill en Londres, el Cenotafio,
la de George Washington en Trafalgar Square e incluso monumentos en recuerdo de Nelson Mandela y Mahatma Gandhi han sido cubiertos con tablones y lienzos protectores para evitar que sean atacados, como ya ocurrió la pasada semana, cuando pintaron la palabra «racista» sobre la estatua del hombre que más se enfrentó a Hitler durante la Segunda Guerra Mundial.