Violencia de género desde el año 2003
Las mil primeras víctimas dejaron 765 menores huérfanos La mayoría de asesinatos fue en el domicilio
Las mil primeras víctimas dejaron 765 menores huérfanos.
En enero de 2003 se comenzó a contabilizar las mujeres asesinadas a manos de sus parejas o con quienes habían compartido su vida durante un tiempo. Desde entonces y hasta el 20 de abril de 2019, día en que fue asesinada la víctima número mil de esta lacra violencia machista, el promedio no deja lugar a dudas: al menos una muerte cada semana, una media de 61 víctimas al año y solamente un mes, enero de 2009, en que no hubo que lamentar la muerte de ninguna mujer por esta violencia ,y los 39 días transcurridos entre el 13 de febrero y el 24 de marzo de 2018 suponen el mayor intervalo sin asesinatos por violencia de género. Hasta la fecha, la cifra de víctimas se eleva ya a 1.055. El 29 de diciembre de 2015 es la fecha más negra: ese día se perpetraron 4 asesinatos por violencia de género. Las víctimas de violencia de género, de las que el 65 por ciento eran españolas, representan el 44,6 por ciento del total de mujeres muertas por homicidio o asesinato (entre los años 2003 y 2017).
Consecuencia de esos crímenes machistas, 765 menores quedaron en situación de orfandad por el asesinato de sus madres en ese período de tiempo, de los que 499 eran hijos o hijas de los agresores y los 266 restantes nacieron durante relaciones anteriores o posteriores de las víctimas con otros hombres. Y casi la mitad de las asesinadas, el 49 por ciento, tenía hijos o hijas menores; datos que vienen a indicar que la maternidad es una de las circunstancias «que aumentan el riesgo para las víctimas», como se pone de relieve, además de por los datos datos anteriores, con el hecho de que tres de cada cuatro mujeres asesinadas entre 2003 y 2019 eran madres.
En un minucioso y detallado informe sobre «Los 1000 casos de víctimas morales por violencia de género en el ámbito de la pareja o ex pareja» elaborado por el Observatorio Contra la Violencia Doméstica y de Género del Consejo General del Poder Judicial , se realiza una amplia radiografía de este tipo de violencia. Se constata que es un fenómeno que afecta a mujeres de todos los ámbitos y orígenes, sea cual sea la clase social, nacionalidad, grupo étnico, edad o nivel de estudios. Así, en lo que se refiere a la edad, se comprueba cómo ello no es obstáculo para que el agresor lleve a cabo sus propósitos cuando ha decidido acabar con la vida de la mujer: La víctima más joven, asesinada el 20 de octubre de 2012, tenía apenas 13 años, mientras que la de más edad, que perdió la vida el 14 de enero de 2019, contaba con 95 años.
La convivencia con el agresor es uno de los factores que incrementan el riesgo para la vida de las víctimas: 605 mujeres asesinadas mantenían la convivencia con su agresor en el momento de su muerte. De hecho, el domicilio que compartían fue, además, el lugar en el que se produjeron el 75 por ciento de estos crímenes machistas.
De 13 a 95 años La víctima más joven tenía 13 años y 95 la de mayor edad.El mes de julio es donde más muertes se han producido