El separatismo radical agita el debate sobre la estatua de Colón
La CUP plantea retirar el icónico monumento Los anticapitalistas reclaman «resignificar el espacio» y avisan que, si no se atiende su petición, tomarán acciones
La CUP ha vuelto a pedir la retirada de la icónica estatua de Colón en Barcelona. Tras haberlo pedido ya en dos ocasiones en años anteriores, ahora regresa a la carga en medio del tsunami de protestas a nivel mundial contra el racismo. «No es solo la retirada del monumento, hemos propuesto la resignificación del espacio», explicó ayer la dirigente cupera Eulàlia Reguant y avisó de que, si no se recoge la demanda de su partido, que va en línea de los colectivos antirracistas y de inmigrantes, tomarán acciones.
¿Qué acciones estan sopesando emprender? De momento, Reguant no dio detalles y se limitó a decir que se tomarán de forma coordinada con los colectivos antirracistas y de inmigrantes. «Trabajaremos qué hacemos y cómo seguimos denunciando la presencia de estas estatuas que muestran el pasado esclavista», explicó Reguant.
La CUP presentó en 2016 una propuesta ante el Pleno del Ayuntamiento de Barcelona para retirar la estatua, pero no sumó ningún apoyo. Dos años más tarde volvió a intentarlo en una comisión del Ayuntamiento, pero tampoco fructificó.
Por ello, el partido antisistema, que se quedó sin representación en el consistorio tras las últimos elecciones de mayo de 2019, ha pedido volver a activar el debate en torno al monumento de Colón, un emblema de Barcelona. Y se ha dirigido a todas las fuerzas municipales, para que tomen partido. «Pedimos al resto de formaciones que se posicionen y dejen de esconderse detrás del argumento del simbolismo», afirmó Reguant, en alusión, principalmente, a JxCat o ERC, que siempre se han opuesto a la retirada de la estatua. En este sentido, sentido, los republicanos –partido más votado– creen que ahora no es una cuestión prioritaria, aunque se abren a estudiar otro tipo de medidas. Ada Colau también se opone a la retirada del monumento –pese a que Jéssica Albiach, dirigente de su mismo partido, lo planteara hace unos días– y apuesta por contextualizarlo con una placa explicativa o una exposición que «recuerde su realidad y lo que supone». «La estatua es un icono de la ciudad de Barcelona para bien o para mal», apuntó la alcaldesa de Barcelona el lunes.
«El skyline de barcelona no puede estar coronado por un monumento de uno de los personajes que inició uno de los mayores homicidios de la historia. La imagen e iconografía de la ciudad debe desvincularse de la connotación racista que tiene la estatua. Por todo ello, volvemos a pedir al gobierno municipal que tome partido por la memoria histórica y justicia global», expresó ayer Reguant, en declaraciones a los medios.
Lo cierto es que en Cataluña el debate en torno al racismo se ha agitado en los últimos días tras registrarse episodios polémicos en este sentido. Por un lado, ha trascendido un audio en que Mossos d’Esquadra dirigen insultos racistas contra un detenido. Por otro lado, han habido incidentes en Premià de Mar (Barcelona) entre los vecinos y jóvenes inmigrantes, acusados de delincuencia.