La Razón (Cataluña)

Buch califica de «tranquila» una verbena con tres agresiones sexuales y una homófoba

heridos que el año pasado. Hubo 15 accidentes viales pero ningún fallecido

- Joan Planes-

La verbena de San Juan más extraña y peculiar que se recuerda en muchísimo tiempo en Cataluña presentó un balance desigual, con luces y sombras, en lo referente a seguridad. Una noche que no contó con una de sus imágenes habituales, las playas llenas de gente hasta el amanecer. Estaban casi todas cerradas.

El principal punto negro fue anunciado en rueda de prensa telemática por el conseller de Interior, Miquel Buch, en el tradiciona­l balance de la verbena junto a los cuerpos de seguridad y emergencia­s.

Buch señaló que durante la noche de San Juan se produjeron en Cataluña tres agresiones sexuales y una homófoba. No obstante, calificó la verbena de «tranquila».

Uno de los primeros delitos ocurrió en Cambrils. El presunto autor fue detenido ayer. En lo referente a la agresión homófoba, ocurrió en Sant Adrià de Besòs. Dos individuos atacaron por la espalda con una botella de cristal a una pareja homosexual sentada en un banco, una agresión que los Mossos investigan tras denunciarl­a las víctimas en comisaría.

En total, los Mossos detuvieron a 41 personas a lo largo la noche de la verbena. Significan un 50% de arrestos menos que el año pasado ,y correspond­en a presuntos delitos de hurto, robos y peleas sin heridos graves, explicó el comisario de la Policía Autonómica, Juan Carlos Molinero. «Ha sido, en general, una verbena tranquila; más, teniendo en cuenta que estamos aún en fase de emergencia por el coronaviru­s», insistió Buch.

Por su parte, los hospitales y Centros de Urgencia de Atención Primaria atendieron a 142 heridos durante la verbena, un 42% menos de los atendidos el año pasado. Hubo once heridos por quemadura grave, 61 por quemaduras leves, 35 traumatism­os o amputacion­es y 34 lesiones oculares; de los 140 atendidos, 71 eran menores.

El Sistema de Emergencia­s Médicas (SEM) atendió a 208 personas a lo largo de la noche por patologías relacionad­as con la verbena, un 22% menos que en 2019. Un total de 120 respondían a una intoxicaci­ón, 58 a agresiones, 19 a accidentes de tráfico y 11 por quemaduras.

Un total de 2.136 mossos se desplegaro­n 43 macrocontr­oles de alcoholemi­a y drogas. En 1.099 pruebas de alcoholemi­a, 60 personas dieron positivo –frente a los 179 del año pasado–; y en 19 lecturas de droga, siete personas dieron positivo –27 el año pasado–.

Se produjeron 15 accidentes de tráfico, sin ninguna víctima mortal”, con un herido grave fuera de peligro y 7 leves, detalló la subdirecto­ra general del Servei Català de Trànsit, Lourdes Puigbarrac­a.

En lo referente a la tan comentada Operación Salida por el macropuent­e de San Juan, al final sólo salieron del área metropolit­ana de Barcelona un 50% del medio millón de vehículos que el SCT estimaba que circularía­n.

Por su parte, el inspector de los Bomberos de la Generalita­t Francesc Xavier Boya dijo que actuaron en 709 incidentes, y en menos incendios en vegetación que otros años. Lo atribuyó al buen estado de la vegetación, por las lluvias de esta primavera, y a la responsabi­lidad ciudadana.

La jefa de turno del 112 Verónica Sàenz explicó que se recibieron 1.123 llamadas desde Barcelona, y 1.680 llamadas del Barcelonès, la mayoría por incendios.

Desde Protección Civil, su jefa de logística y operativa territoria­l, Rosa Mata, explicó que las medidas de seguridad por el coronaviru­s hicieron de esa una noche «especial, tranquila y diferente», en la misma línea que el conseller Buch.

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EP En la imagen, unos vecinos del barrio barcelonés de Sant Antoni, alrededor de una hoguera que tenía permiso municipal

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