ERC rescata el discurso independentista pero lo supedita al fin de la pandemia
HOJA DE RUTA PREELECTORAL «La agenda de la reconstrucción es la agenda de la república» advierte Pere Aragonès en un acto autoreivindicativo con mensajes velados al PSOE y a JxCat
Esquerra celebró ayer por la mañana un acto de marcado acento preelectoral para sentar las bases de lo que será su programa en materia social y dejar claro que su apuesta sigue siendo la independencia. Un aviso a ambos lados del tablero, tanto al PSOE como a JxCat, en pleno debate sobre los comicios a la presidencia de la Generalitat. «La agenda de la reconstrucción es también para nosotros la agenda de la república catalana. Tenemos muy claro que una situación de crisis como la actual, en la que nos lo estamos replanteando todo, no tiene que servir de excusa para que algunos quieran que nos olvidemos del proceso de autodeterminación y de la reclamación de amnistía». Así de claro se mostró el líder de los republicanos, Pere Aragonès, ante la plana mayor del partido en Barcelona.
Con el lema «De la Reconstrucción a la República», el plan con el que los republicanos pretenden compatibilizar la gestión de la crisis con el impulso de la autodeterminación se basa en siete ejes: reactivar la economía, reforzar el estado del bienestar, reconciliar la vida laboral con la personal, mejorar la vertebración del territorio, impulsar las energías renovables, potenciar la cultura y construir una «vía ancha» hacia la independencia. Una hoja de ruta que en el plano social y económico comparte muchas coincidencias con los “comunes” y se distancia completamente del perfil postconvergente.
De hecho, el también vicepresidente de la Generalitat ha dejado muy claras sus intenciones en un mensaje dirigido al PSOE y Unidas Podemos: «No participamos en este debate para reconstruir el régimen del 78 como hacen otras fuerzas políticas, sino para construir una república catalana que se traduce en derechos y libertades para todos». Una advertencia después de días recordando que su apoyo en el Congreso es incompatible con posibles ententes del Gobierno y Ciudadanos.
En el ámbito económico, Aragonès estima que Cataluña necesita movilizar 30.000 millones de euros procedentes del fondo de reactivación europeo en cinco años para poder sufragar todas las medidas necesarias y minimizar los estragos de la crisis del coronavirus.
Además, en el apartado de la reactivación económica la diputada en el Congreso Carolina Telechea defendió un modelo basado en el conocimiento, una economía que destine el 3% del PIB a la investigación, además de la creación de una banca pública de inversiones y una nueva fiscalidad «justa y verde».
De hecho, las propuestas económicas y sociales –con una defensa clara de los servicios públicos– protagonizaron el grueso de las intervenciones con la intención de exhibir programa y gestión para asaltar la presidencia de la Generalitat.