LA AMBICIÓN DEL PODER
Parece que el principal problema ruso no era la pandemia del nuevo coronavirus -con la curva de contagios todavía alta- sino el plebiscito ante el temor a una baja participación, ¿por qué?
El presidente Putin tiene problemas en una variedad de frentes: la pandemia, el precio del petróleo, Siria, Libia, Crimea, las sanciones internacionales, etc. Su prioridad es y siempre ha sido mantenerse en el poder. De ahí la importancia del referéndum constitucional. Tal y como se planeó originalmente, habría resultado en un claro «sí». Pero con todos los problemas a los que se enfrentan él y Rusia, eso estaba menos claro. Naturalmente, Putin ha podido manipular los votos para garantizarse una victoria aplastante. No puede perder. Aun así, debe parecer que está ganando de manera justa. Visto desde esta perspectiva, lo último que quería es que se asocie la pandemia a él o su régimen.
El presidente ruso, Vladimir Putin, ha afirmado recientemente que creará un nuevo sistema de seguridad global. ¿Qué significan estas palabras?
Con estas manifestaciones, Putin está expresando sus deseos. Quiere que Rusia sea un gran jugador en la arena internacional. De hecho, Estados Unidos y China siguen siendo las dos superpotencias a escala global; mientras que la Unión Europea es una potencia económica y Rusia es una potencia militar. Desafortunadamente para Rusia, su economía es del tamaño de Bélgica; por lo tanto, nunca podrá jugar en la liga a la que aspira Putin. Pero eso no evitará que Putin pretenda que Rusia es un partido esencial en el tablero político.
¿Se siente cómodo Putin con Donald Trump como presidente de Estados Unidos? ¿Cómo ha evolucionado la relación personal y política entre ellos en los últimos cuatro años?
Putin tenía grandes esperanzas de que Trump adoptara una política sólidamente pro-rusa. Debido a una variedad de factores, eso no ha sucedido y, en cambio, la política estadounidense sigue siendo muy crítica con Rusia y, sin embargo, apoya a Ucrania. Trump sigue siendo probablemente la preferencia de Putin, ya que el candidato demócrata a la Casa Blanca, Joe Biden, probablemente adopte una posición aún más pro ucraniana y antirrusa. En todo caso, el entusiasmo incial de el presidente Putin por la llegada de Donald Trump seguramente haya disminuido.