El Corte Inglés se blinda frente a la crisis y firma un crédito de 960 millones con aval del Estado
Permitirá al gigante de la distribución asegurarse liquidez durante un ejercicio sin necesidad de garantías
El Corte Inglés sigue reforzando su liquidez de cara a la complicada situación económica que va a dejar tras de sí la crisis sanitaria del coronavirus. La compañía de distribución ha firmado un nuevo contrato de financiación por un importe máximo de 959,9 millones de euros que cuenta con el aval del Instituto de Crédito Oficial (ICO), según informó ayer en un hecho relevante la compañía. La operación permitirá trasladar a este nuevo convenio parte de la anterior línea de crédito firmada el pasado 1 de abril por un total de 1.341 millones de euros.
El nuevo acuerdo, que ha sido suscrito por un total de nueves entidades financieras, es a cinco años. Con esta financiación, «el grupo se asegura la liquidez por un periodo superior al año y sin ningún tipo de garantías», según explicó en su nota.
Los bancos no participantes en el préstamo ICO permanecen en el revolving (línea de crédito) hasta su vencimiento en marzo 2021. Las entidades que han participado en esta nueva operación, pilotada por el consejero delegado de El Corte Inglés, Víctor del Pozo, son Banco Santander, BBVA, Caixabank, Sabadell, Bankia, Crédit Agricole, Ibercaja, Kutxabank, Liberbank.
Otras operaciones
La firma de este crédito se suma a otras medidas que ya había tomado el grupo y que, según aseguró en su avance de resultados del pasado 19 de marzo, afrontar el impacto de la Covid-19 desde una posición de fortaleza financiera. En el mes de febrero de este año, justo antes del estallido de la pandemia, el grupo firmó la refinanciación de la deuda bancaria por un importe máximo agregado de hasta 2.000 millones de euros. Este acuerdo, según informó entonces El Corte Inglés, le permite una financiación estable, con menor coste, mayores plazos y sin garantías, al mismo tiempo que amplía los plazos hasta febrero de 2025.
A 29 de febrero de 2020, al cierre de su ejercicio fiscal, el grupo de distribución tenía una deuda de 2.729 millones, 638 millones menos que un año antes.