Correos incorpora a 4.000 empleados fijos a su plantilla y convoca otras 1.900 plazas nuevas
incluye las tasas de reposición de 2019 y 2.000 puestos del plan de estabilización de empleo temporal 2018-2020
Más de 4.000 personas se incorporaron ayer a un puesto de trabajo fijo en Correos, dentro de las categorías operativas de reparto motorizado y a pie en el ámbito urbano y rural, agente de clasificación y atención al cliente en oficinas. La compañía, además, ha convocado otras 3.421 plazas. Según informó Correos a través de un comunicado, de los 4.005 puestos de trabajo fijo, 1.896 desempeñarán labores de reparto urbano y servicios rurales motorizados, 722 lo harán de reparto urbano y servicios rurales no motorizados, 725 ocuparán puestos de agentes de clasificación, y, por último, 662 desarrollarán funciones de atención al cliente. La compañía destacó que más de 166.000 personas se inscribieron para realizar las pruebas de selección que tuvieron lugar de forma simultánea en 29 localidades el pasado 19 de enero.
Pruebas
Las pruebas, con carácter eliminatorio, estuvieron relacionadas con materias relacionadas con los productos, servicios y procesos de trabajo de Correos. El proceso de selección se completó con una fase de méritos posterior en la que se ha valorado la experiencia, los permisos de conducción (en su caso) y la formación necesaria para el adecuado desempeño del puesto de trabajo.
Correos destacó que con la cobertura de estos 4.005 puestos de trabajo fijos muestra su apuesta por la creación de empleo estable «como la mejor garantía para seguir ofreciendo el mejor servicio a toda la ciudadanía». Precisamente, en línea con ese compromiso con el empleo estable, Correos ya ha convocado otros 3.421 puestos de personal laboral fijo en categorías operativas. Se trata, según Correos, de una convocatoria conjunta que incluye los puestos correspondientes a las tasas de reposición aprobadas para el año 2019 (1.421 plazas), así como 2.000 puestos de los contemplados en el plan de estabilización de empleo temporal 2018-2020.
Correos obtuvo un beneficio neto de 14,8 millones de euros el año pasado. La compañía venía de un 2018 en el que había registrado unas abultadas pérdidas de 153 millones de euros. Unos números rojos que no habían cesado desde 2014, año en el que había cosechado sus últimas ganancias. La paquetería ha pasado a ser el motor de la compañía toda vez que el correo convencional ha experimentado un gran retroceso en los últimos ejercicios.