El SPD se adelanta al partido de Merkel
A un año de las elecciones federales Los socialdemócratas alemanes eligen al popular y centrista ministro de Finanzas, Olaf Scholz, como su candidato
Los socialdemócratas alemanes han tomado la delantera al resto de partidos al anunciar ayer por sorpresa a su candidato para las elecciones federales del próximo año. Olaf Scholz, el actual ministro de Finanzas y vicecanciller en la Gran Coalición que gobierna Berlín, tendrá la tarea titánica de resucitar un SPD en horas bajas y absorber al electorado centrista que dejará huérfano la marcha de Angela Merkel tras cuatro mandatos como canciller de Alemania.
Ocho meses después de haber sido derrotado en las primarias para dirigir el partido por el tándem izquierdista formado por Saskia Esken y Norbert WalterBorjans, la dirección del SPD apuesta por el pragmatismo eligiendo como cabeza de cartel a su político mejor valorado en los sondeos de opinión gracias a su gestión de la crisis económica generada por el coronavirus.
«Me alegro de la nominación y quiero ganar», aseguró Scholz en una rueda de prensa en la que logró infundir algo de pasión a su habitual hieratismo y falta de carisma y presentarse, como señal de unidad, entre las diferentes familias socialdemócratas. El político de 62 años, que fue alcalde de Hamburgo hasta entrar en el Gobierno en 2018, subrayó la «gran responsabilidad» que implica esta decisión y se mostró agradecido de que la dirección del partido la asumiese por unanimidad, a propuesta de los presidentes.
Uno de ellos, Norbert WaltersBorjans, subrayó la «alta estima» de la que goza Scholz entre la ciudadanía y el partido, su «reputación», su «experiencia» en el Gobierno y su «solidez».
La copresidenta Esken no se quedó atrás en los elogios y lo definió como un «jugador de equipo», con «capacidad de gestión en crisis» e «ideas de futuro». En un intento de calmar a la desconcerta ala izquierda del SPD, tuiteó que desde diciembre «hemos visto a Olaf Scholz como un socio fiable, que trabaja en equipo y que quiere luchar por políticas socialdemócratas para este país y que comparte con nosotros la visión de una sociedad justa».
Scholz, con un 57% de popularidad, es, según el barómetro «Deutschlandtrend», el ministro socialdemócrata mejor valorado. En el Gobierno, solo Merkel, con un 70%, y el joven ministro de Sanidad, el conservador Jens Spahn, con un 60%, le superan.
Sin embargo, ser cabeza de cartel parece haberse convertido en un regalo envenenado en un partido a los que los sondeos colocan en tercera posición tras conservadores (38%) y ecologistas (18%). Su escuálido 15% queda lejos de la debacle del 20% de 2017.