CUANDO ESPAÑA INCLUYÓ A LOS AMERICANOS EN LAS CORTES
o lo había hecho nadie antes. Ningún imperio había sentado a representantes de las colonias o provincias extra metropolitanas en una cámara de representación al mismo nivel que el resto. La Revolución francesa llegó a reconocer el fin de la esclativud en Haití y los derechos de los esclavos y libertos, pero poco más. Gran Bretaña negó la representación a los colonos, que tenían sus asambleas representativas en cada provincia, y estos se revelaron contra la metrópoli. Tampoco lo hicieron los portugueses con Brasil, ni Holanda con sus colonias. Los españoles de 1810 consideraban que la nación la componían las personas de ambos hemisferios, y que, por tanto, debían tener representación en las Cortes. La Junta Central, el gobierno provisional que los españoles se dieron en ausencia del Rey, publicó un decreto en 1809 convocando Cortes Generales y Extraordinarias. Otro decreto, fechado el 14 de febrero de 1810, instó a los americanos a enviar representantes a España por cada virreinato. Hasta que llegaran a la metrópoli, el decreto estableció que fueran elegidos unos suplentes. De las once circunscripciones electorales de Ultramar se hicieron elecciones en seis: los virreinatos de Nueva España y Perú, y las capitanías generales de Cuba, Puerto Rico, Santo
NEN EL AÑO 1810 EL IMPERIO ESPAÑOL DECIDIÓ DAR VOZ A LAS DISTINTAS PETICIONES DE LOS REPRESENTANTES DE LAS COLONIAS
Domingo y Guatemala. En los virreinatos de Buenos Aires y Santa Fe, y las capitanías de Caracas y Filipinas, se hicieron elecciones parciales. En total estuvieron 86 diputados americanos en los cuatro años que duraron las Cortes; de ellos, 25 fueron eclesiásticos y 22 abogados. Las Cortes se reunieron el 24 de septiembre de 1810, y dieron comienzo los trabajos en los que a las reformas del Estado del Antiguo Régimen, los diputados americanos incorporaron sus reivindicaciones. El segundo día de sesiones, la delegación ultramarina