La lectura se dispara durante la pandemia
Según el Ministerio de Cultura, leemos un 7% más que hace una década y la lectura es un hábito para el 64% de los españoles
En una rueda de prensa telemática, el ministro de Cultura y Deporte, José Manuel Rodríguez Uribes, y el presidente en funciones de la Federación de Gremios de Editores de España dieron a conocer los datos definitivos sobre la lectura en España en 2020. El gran titular pasa por el aumento de la lectura en el tiempo libre, probablemente forzado por el confinamiento y que ha experimentado una subida del 7% en la última década. Esto significa que, si en 2010 el 57% de los encuestados encontraba lugar para la lectura en su ocio, ahora lo hace el 64%. Del mismo modo, también aumenta la variación interanual, que en 2019 se registró en el 62,2%. Entre las noticias no tan positivas, queda el dato de que 1 de cada 3 españoles no lee ningún libro al año y, más comprensiblemente, que la lectura por motivos de trabajo o estudios descendió casi 4 puntos porcentuales, situándose en el 23,1% de los encuestados.
Desde que se decretara el cierre de comercios y el confinamiento, tanto libreros como grandes superficies superficies venían avisando de un repunte en los hábitos lectores de los españoles que el barómetro no ha hecho más que reafirmar. Esto se ha dejado notar especialmente en el rango de edad comprendido entre los 24 y los 35 años, aumentando su porcentaje de lectura un 15% durante el Estado de Alarma y un 4% en el total del año. Por debajo, también hay buenas noticias, ya que los menores de edad siguieron con el crecimiento crecimiento que mostraban las últimas series anuales y, en plena pandemia, un 6% más de ellos se declaró como «lector habitual».
En cuanto a la demografía de género, las mujeres vuelven a destacarse como los grandes lectoras de España, aumentando su consumo de libros hasta un 10% durante el confinamiento y un 3% en total. En la imagen fija, el 66% de las mujeres se declaran lectoras frente al 48% de los hombres que lo hacen habitualmente. Una relación de desigualdad parecida se puede establecer entre las zonas con mejor renta per cápita (Madrid, Cataluña y País Vasco), que son las que más lectores habituales registran y también las que más crecen. En el otro lado del espectro se sitúan Extremadura, Canarias y Andalucía, aunque también han mejorado sus datos respecto a 2019.
Libros como refugio
Además de los datos sobre los hábitos de lectura, el barómetro arrojó luz sobre las nuevas formas de consumo. Así, el 71,1% de los consultados sigue prefiriendo las librerías como lugar de compra frente al 38,4%que acude a internet y un 12,4 que se limita a adquirir libros en ferias temáticas y mercadillos. Quizá el dato más significativo de este apartado pase por la brecha generacional, ya que si acotamos la estadística hasta los españoles entre 25 y 44 años, más de la mitad ya se ha pasado de manera exclusiva a la compra en web. De esta manera también se entiende el cambio en el formato, que sitúa a los lectores digitales en el 30%, más de 25 puntos que hace una década. Eso sí, más de la mitad de ellos admite abiertamente haberse descargado libros de manera ilegal y hasta un 29,4% confiesa no saber distinguir las páginas legales de las «piratas».
Según el barómetro del Ministerio de Cultura, que también incluye un estudio cualitativo, hasta un 81% de los entrevistados confesó haberse sentido arropado por la literatura durante el confinamiento y, en las entrevistas de valoración, las palabras más repetidas sobre el aporte de los libros fueron «entretenimiento», «desconexión», «ilusión» y «alegría».