Así fue la noche de Bartomeu en el calabozo
La jueza descarta imputar al club, pero sí al ex presidente y a su círculo próximo. Los Mossos estiman un perjuicio de 1,2 millones
La entidad podría personarse como acusación particular al considerarse que resultó perjudicada en el caso
La jueza que instruye la investigación del caso conocido como «Barçagate» decidió ayer no imputar al Fútbol Club Barcelona, como entidad, pero sí al ex presidente entre 2014 y 2020, Josep Maria Bartomeu, y a otros tres ex directivos de su círculo más próximo. Uno de ellos es su ex jefe de gabinete de la presidencia, Jaume Masferrer.
De esta manera, el caso de un presunto desvío de fondos para una campaña en las redes sociales queda desvinculado del club y está acotado ahora al ex presidente y su entorno, teniendo en cuenta que los cuatro investigados ahora no tienen ninguna vinculación con la entidad azulgrana. Los Mossos estiman que el perjuicio al club por el «Barçagate» podría ascender a 1,2 millones de euros.
Bartomeu y Masferrer pasaron ayer a disposición judicial sobre las 11:30 horas. Tras acogerse a su derecho a no declarar, se deslizó que lo más probable es que ambos salieran en libertad con cargos. Y sucedió. Bartomeu y Masferrer salieron de la Ciudad Judicial de L’ Hospital et de Llobregat por una puerta lateral que da acceso a la zona de calabozos donde se custodia a los detenidos, con lo que pudieron esquivar a las cámaras que les esperaban en los accesos principales. Se supo que había salido porque en breves instantes un joven sin mascarilla se hizo un selfie con Bartomeu y lo colgó en las redes sociales.
La causa, que se inició en mayo de 2020, sigue abierta por los presuntos delitos de administración desleal y corrupción en los negocios. La jueza levantó precisamente en la misma mañana el secreto de sumario, motivo por el cual las defensas han recomendado a sus representados no declarar, ya que no habían tenido tiempo para estudiar la causa.
Los investigados presuntamente fraccionaron contratos a la empresa 13Ventures para esquivar esquivar los mecanismos de control interno del club y con la idea de impulsar una campaña de desprestigio en redes sociales a jugadores y ex directivos del club, explicaron fuentes jurídicas. Dos de los capitanes y símbolos azulgrana, Leo Messi, Gerard Piqué, quedaron salpicados.
En lo que respecta al Barça, la jueza comunicó que el club no puede considerarse un posible implicado en los hechos investigados sino más bien un perjudicado con lo que podría personarse en la causa como acusación particular, al considerarse que resultó perjudicada, sin necesidad de consignar fianza.
Al quedar levantado el secreto de sumario, se deja al descubierto toda la carga probatoria que se recabó en contra de los que fueron mandatarios azulgranas. Existía la posibilidad de que el Barça pudiera acabar imputado en la causa, como persona jurídica, posibilidad que se ha descartado. Desde el 7 de julio de 2020, el FC Barcelona, a través
El presunto desvío de fondos para una campaña en las redes sociales se desvincula del club azulgrana
de su abogado Carles Monguilod, está personado en la causa del «Barçagate» como perjudicado.
A raíz de esta investigación iniciada en julio de 2020 tras recibir la denuncia del grupo de socios Dignitat Blaugrana, los Mossos detuvieron el lunes a primera hora de la mañana a Bartomeu y Masferrer, así como también a dos cargos que siguen en nómina del Barça.