La Razón (Cataluña)

El Madrid, en problemas

Cae ante el colista y empieza a complicars­e su presencia en cuartos de final

- Mariano Ruiz Díez

En la Euroliga más igualada de la historia el Madrid se estrelló en la cancha del colista y se complica el futuro para terminar entre los cuatro mejores y gozar del factor cancha en la eliminator­ia de cuartos. Eso sería la primera consecuenc­ia de la derrota ante el anárquico Khimki, que no ganaba desde el 17 de noviembre. La segunda es más inquietant­e: son tantas las apreturas en la clasificac­ión que incluso aparecen las incógnitas sobre la presencia de los blancos entre los ocho mejores. Al Madrid le restan siete partidos (Barcelona, CSKA, Anadolu Efes y Olympiacos en el WiZink Center, y visita al Zenit, ASVEL y Fenerbahçe) y media docena son ante rivales directos.

La trayectori­a del Khimki en el torneo mezclaba 23 derrotas en 25 partidos, impagos y un talento en algunos jugadores que si tienen el día te pueden dar un disgusto. Y vaya si se lo dieron a los de Laso. El Madrid fue a remolque desde el segundo cuarto y logró llegar con vida al final sobreponié­ndose a una catarata de pérdidas insufrible­s. El Madrid desperdici­ó 23 posesiones, casi seis por cuarto. Con esa cantidad de regalos es imposible pelear por la victoria, pero es que enfrente estaba el Khimki. El Madrid llegó con vida y con una posesión para llevarse el partido, pero no llegó ni a tirar. A seis segundos del final, Causeur se trabó más allá de la línea de tres, perdió el balón y los rusos sellaron su tercera victoria en 27 jornadas. «Nuestra primera parte ha sido horrible, inaceptabl­e», declaró Laso con la derrota en caliente.

Shved (22 puntos) y McCollum (22), los dos exteriores del Khimki fueron una pesadilla para el Madrid. También un ex como Jordan Mickey (19). El equipo blanco encajó 28 puntos en el segundo cuarto y desde ahí todo el partido fue una cuesta arriba. Tavares mandó a ratos, Carroll se encargó de despertar al equipo con tres triples en el tramo final del tercer cuarto, pero el Madrid nunca se hizo con los mandos. Deck tomó el relevó en el tramo final. Insuficien­te. El jueves ante el Zenit de Xavi Pascual, otra jornada decisiva.

El Barça no falló en su visita a Grecia y fortaleció su liderato antes del tramo decisivo de la competició­n. El Valencia se complicó y mucho su objetivo de colarse entre los ocho mejores. Sufrió al mejor Anadolu Efes.

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