La Razón (Cataluña)

Viajar por todo el mundo a lomos del clásico «Egg Sandwich»

- POR ÁNGELA LARA

Hace ya un tiempo, Oriol Martínez emprendió en solitario su primer proyecto de restauraci­ón con el huevo como protagonis­ta. En aquella ocasión, con la apertura de The Egg-Lab Brunch, apostó por un concepto nuevo, basado en diferentes propuestas en torno al huevo benedict y cada una de ellas inspirada en la cocina y cultura de un país. Ahora, Oriol se ha unido a Guillermo Torras para crear The Egg-Lab Street, un restaurant­e en el que el huevo sigue siendo el elemento central, pero en esta ocasión en formato bocadillo o sandwich.

«En los dos restaurant­es hemos cogido un clásico y lo hemos reinventad­o», señala el dueño, quien al respecto comenta que en The Egg-Lab Street «la idea surgió del clásico Egg Sandwich estadounid­ense, a partir del cual hemos creado nuestras propuestas», propuestas que se basan en la gastronomí­a callejera de diferentes lugares del mundo como India, México, Tailandia, Estados Unidos o Reino Unido.

Así pues, en la carta, el comensal puede encontrar combinacio­nes tan sabrosas y originales como la del Frida (tinga de pollo casera, aguacate, queso Jack Monterrey, huevo a la plancha, cebolla encurtida, salsa chipotle y topping de nachos y pico de gallo) o la del Shiva (pollo tika masala, cilantro, soft scrambled eggs, lechuga, queso Montserrey, pasas y chutney de mango) y todas ellas elaboradas con «huevo campero de una granja de Dosrius, que llega cada día fresco directamen­te del payés», tal y como apunta Oriol Martínez, quien destaca que «pese a tratarse de bocadillos, hay mucha elaboració­n detrás». «Todas las proteínas las elaboramos nosotros en el restaurant­e», asegura y a modo de ejemplo explica que «en el sandwich Tarantino, para elaborar el pulled pork marinamos la carne durante 24 horas y después la cocinamos 8 horas más».

«Se trata de bocatas de mucha calidad», los cuales juegan con el contraste de sabores del huevo, la proteína como el pollo, el cerdo o el salmón, y la salsa. «Tenemos ocho variedades de salsas y todas ellas hechas por nosotros , como la de mostaza de mango, la sweet bourbon BBQ, la de mayo de chipotle o la bullyonise»,

Así, pues, la carta presenta ocho versiones diferentes del clásico Egg sandwich, cada una de las cuales es una reinterpre­tación de este plato a partir de la ‘street food’ o comida callejera típica de diferentes lugares del mundo.Y a partir de ahí, el comensal puede personaliz­ar su bocadillo, añadiendo ingredient­es o incluso diseñándol­o a su gusto. Además, tal y como apunta Oriol, «la idea es que siempre haya novedades en la carta, que es muy vivia» y, en esta línea, cada mes se crea un especial, que, si funciona, se acaba incorporan­do a la carta».

Por último, como acompañami­ento, en The Egg Lab Street se ofrece al cliente la opción de elegir entre dos acompañami­entos: las típicas patatas fritas caseras o los chips de boniato. Y de postre, el cross-quini de Nutella, elaborado con pan de molde hojaldrado y crema de chocolate.

En definitiva,esta nueva apuesta gastronómi­ca, en la que el take away y delivery tienen un gran peso, «busca aportar algo de valor a la nueva escena gastronómi­ca del fast food», destaca el dueño.

The Egg-Lab Street

Dirección: C/ de la Ciutat de Balaguer, 14

Teléfono: 93 410 53 81

Horario: de martes a viernes de 12 a 16 h. y de 20 a 23h. Sábado y domingo de 10 a 16 h y de 20 a 23

El recienteme­nte inaugurado The Egg-Lab Street basa su propuesta en bocadillos muy elaborados y de calidad, con el huevo como protagonis­ta y con toques de la gastronomí­a callejera de diferentes lugares

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EFE
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Gastronomí­as de la India, México, Tailandia, Estados Unidos o Reino Unido. están presentes en el «Egg Sandwich»

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